Alcohol de boca en boca y sin mascarilla en una discoteca de Torremolinos

En pleno subidón de una conocida canción electrónica, la fiesta alcanza su punto álgido. El 'dj' a cargo de la animación del local se viene arriba y, encaramado a una mesa, da un trago a una botella de alcohol y lo escupe al público. Acto seguido da de beber del mismo envase a numerosas personas. Son pocos los segundos de un vídeo que se ha difundido en redes sociales esta mañana, con un mensaje en el que se apunta a la discoteca Kokun Ocean Club de Torremolinos como el lugar de los hechos.

Según explican desde el propio establecimiento, el vídeo se grabó el martes 7 de julio, en una de las fiestas organizadas por los promotores Les Castizos. Un portavoz del establecimiento ha indicado a SUR que de momento han roto relaciones comerciales con el grupo, ya que dicen no entender cómo pudieron «incitar a los clientes a comportarse así». «Cuando eso ocurrió la normativa era otra. Nuestro establecimiento cumple todas las medidas de seguridad actuales, la gente viene y se queda sentada y con mascarilla», añade.

Además, el portavoz apunta que el vídeo muestra una parte de la discoteca en la que se congregó la gente ante la llamada del pinchadiscos, indicando que en el resto de la pista de baile se estaba manteniendo la distancia de seguridad. De momento no han trascendido actuaciones policiales a raíz de este vídeo ni de ninguna otra fiesta en Kokun.

Les Castizos ha mandado un comunicado este mismo sábado a raíz de la polémica que ha suscitado la difusión del vídeo, que acumula decenas de miles de reproducciones y comentarios negativos. En el escrito oficial, la promotora pide disculpas por lo ocurrido: «Nos sentimos totalmente responsables de los actos acontecidos, a su vez avergonzados y arrepentidos». De igual manera, desde Les Castizos restan responsabilidad a Kokun Ocean Club por cómo se gestionó aquella fiesta.

Según fuentes cercanas al establecimiento consultadas por SUR, hasta ahora no se habían difundido imágenes de esta fiesta ni de ninguna otra en el establecimiento porque la organización pide a los usuarios que tapen las cámaras de los teléfonos móviles para evitar que trascienda lo que ocurre en el interior del local, algo que desde la dirección del establecimiento niegan y desmienten en declaraciones a este diario.

Mientras tanto, desde la Asociación de Hosteleros de Málaga (Mahos), han mandado un mensaje de repulsa en sus redes sociales: «Muestra una actitud negligente en plena pandemia. Jamás ampararemos semejante atentado a la salud pública y reiteramos nuestro compromiso con la salud pública».