Un torbellino «diablo de polvo» sorprende a los conductores entre Mijas y Fuengirola

El fenómeno que se ha producido se denomina tolvanera, y también es conocido popularmente como «diablo de polvo». José Luis Escudero, experto en la meteorología malagueña y responsable del blog Tormentas y Rayos, en SUR.es, explica de qué se trata: «Las tolvaneras eran muy frecuentes hace años; se forman sobre todo en verano, los días secos como hoy, con viento y diferencias de temperatura en distintas captas, que dan lugar a estos remolinos».

Escudero pide que no se confundan con los tornados ni otros fenómenos meteorológicos mucho más extremos. «Son muy habituales en sitios llanos como Antequera, incluso los cazatormentas se llegan a meter dentro y se llenan de polvo y arena, pero no pasa nada», añade. Las rachas de viento en estos casos oscilan entre 20 y 40 km/h, y por el contraste entre la sequedad del suelo, el viento y la temperatura, es lo que hace que se levante esa vistosa nube de polvo.

El director del Centro Meteorológico de Aemet, Jesús Riesco, coincide en que las tolvaneras son fenómenos comunes, motivados por situaciones en las que se produce un recalentamiento del suelo combinado con aire frío por encima de esa capa. «Es un remolino sin conexión directa con una nube, visible por el polvo y la arena que levanta».

A veces se desplaza y alcanzar zonas asfaltadas y aceras, donde puede llegar a mover las sillas de las terrazas de los bares, a lo sumo. Su duración es muy breve, del orden de un minuto, y tiene dimensiones de poca anchura, aunque alcanza algunas decenas de metros de altura.