'De él a ella': el testimonio de la esteponera intersexual, Ana Hellen, sale a la luz en noviembre

Esta joven de 29 años nació con genitales de apariencia masculina por lo que fue registrada como varón bajo el nombre de Sergio. La persona con este tipo de intersexualidad tiene cromosomas y los ovarios de una mujer aunque a la vista parezca un hombre. Los labios mayores de los genitales externos femeninos se fusionan, el clítoris se agranda y parece un pene. «Yo desde pequeña sabía que era una chica pero en el entorno de una familia tradicional era muy difícil reconocerlo, incluso, para mí misma. A los 9 años le conté a mi madre que me gustaban los chicos y pensaba que era homosexual», señala Ana Hellen.

La infancia de la esteponera fue complicada pues confiesa haber sufrido graves episodios de acoso escolar por dicha condición sexual. La primera sorpresa apareció a los 11 años con los primeros síntomas de la regla en lo que, a priori, los médicos pensaban que eran gases. «Llega un punto en que mi madre se revela contra el diagnóstico porque cada mes tenía dolores y se me hinchaban los pezones y ningún medicamento de los que me habían recetado me hacía mejorar», narra la esteponera quien aclara que «tras una analítica de sangre se dan cuenta que presento los síntomas de la regla porque tengo las hormonas femeninas muy alteradas para ser un hombre, que era lo que pensaban que era en ese momento».

La vida de Hellen sigue desde entonces su rumbo pensando que es un chico homosexual y no es hasta los 21 años que decide dar el paso de comenzar una transición hacia mujer que es lo que siempre la ha identificado. «Desde que acepté que era transexual y empecé el proceso hasta que se dieron cuenta que realmente era intersexual pasaron cinco años», apunta.

«Todo este camino ha sido complicado para mí. Comuniqué a mi familia que me sentía mujer en un grupo de Whatsapp y, la verdad, que todos me apoyaron y me sentí arropada», añade.

Reconocimiento médico

Uno de los puntos más curiosos de la historia de Ana Hellen es cómo descubre que es intersexual pues no se lo diagnostican, en un principio, en la unidad que le lleva su proceso de transexualidad. «Me hicieron un reconocimiento médico para saber si estaba apta o no apta para el puesto de trabajo que iba a comenzar. Fue entonces cuando el médico me llamó y me citó en la consulta pidiéndome que fuera acompañada porque habían encontrado unas anomalías que, aunque no me impedían trabajar, sí tenía que saber», relata Ana Hellen, a la vez que reconoce que «en ese momento sentí un miedo horrible porque pensaba que podía tener un cáncer o cualquier otra enfermedad grave».

La esteponera acudió al centro médico acompañada de su hermana y fue entonces cuando supo de su condición. «El doctor me dijo que lo que me iba a contar no era fácil de digerir, incluso para él mismo, y fue entonces cuando me puso delante del monitor y me enseñó mis ovarios», señala Ana Hellen a la vez que reconoce que «es alucinante cómo de repente entras a una consulta pensando que eres él y sales siendo ella».

Esta situación supuso un shock para la esteponera que tuvo que asimilar su nueva situación. «De buenas a primeras tengo que desmentir 26 años de mi vida, que no es fácil, porque yo he pasado por bullying, por acoso y por una trama súper trágica con mi expareja, y solo de pensar que me podía haber evitado todo ese dolor de cabeza hacía tiempo sabiendo lo que realmente me ocurría, me frustra», relata a la vez que reclama «más ayuda psicológica en estos casos».

«Un personaje ficticio ha vivido durante un tiempo en mi vida»

Ana Hellen no renuncia a su pasado, al contrario, asegura que «forma parte de ella» y así se refleja en su primer libro. No ha sido fácil para la joven asimilar su intersexualidad y, por ello, ha decidido hacer pública su historia para que su testimonio pueda ayudar a otras personas que pasen por lo mismo.

En su obra muestra su experiencia y su manera de afrontar la situación a través de pasajes de su propio diario y cartas escritas a personas importantes que han influido en ella durante este tiempo. «Un personaje ficticio ha vivido durante un tiempo en mi vida», señala haciendo referencia a su identidad como chico en los primeros años de su camino vital y no reniega de él, pues forma parte de su experiencia. «A mí no me molesta que alguien de la calle que me conoce de toda la vida, por error me llame Sergio, porque al fin y al cabo yo admiro esa parte de mí», asevera.

La joven ha pasado por un arduo proceso de aceptación que ha podido superar gracias a su fortaleza. «Me miro al espejo y me respeto dándome mucho amor propio», señala Hellen quien ha decidido «no someterse a ninguna operación».

La esteponera reconoce haber pasado momentos incómodos también a nivel médico. «Al principio me sentía un poco como ratón de laboratorio y recuerdo un día en Benalmádena en una ecografía donde entraron estudiantes de medicina a ver mi caso pero, en el fondo, lo comprendo porque sé que es un tema raro poco frecuente», señala.

El departamento de Cultura del Ayuntamiento de Estepona ha respaldado a la joven escritora impulsando la presentación de su libro que tendrá lugar el próximo 17 de noviembre en el Auditorio Felipe VI a las 19 horas.