Investigan las obras de un chiringuito con sótano de hormigón en la playa del Castillo de Fuengirola

Las obras de remodelación del chiringuito Bikini Beach, en la playa del Castillo de Fuengirola están en el punto de mira después de que la Federación Malagueña de Ecologistas en Acción haya denunciado ante la Junta de Andalucía y la Demarcación de Costas del Estado el «incumplimiento» en dicha obra de lo establecido en la nueva legislación de Costas.

Desde la organización ecologista aseguran que dicho chiringuito, que se encuentra «a escasos metros de la zona de protección del entorno arqueológico del Castillo de Fuengirola», tendrá una superficie total de construcción permanente de 440 metros cuadrados y que contará con un sótano de hormigón, mientras que la Ley especifica que «las ocupaciones previstas para los tramos urbanos de las playas podrán disponer de instalaciones destinadas a establecimientos expendedores de comidas y bebidas, con una ocupación máxima, salvo casos excepcionales debidamente justificados, de 200 metros cuadrados en una sola planta y sin sótano, de los cuales 150 metros cuadrados podrán ser de edificación cerrada y el resto terraza cerrada mediante elementos desmontables que garanticen la permeabilidad de vistas», de manera que a esta superficie «se podrán añadir otros 70 metros cuadrados de ocupación abierta y desmontable más una zona de aseo, que no podrá superar los 30 metros cuadrados, siempre que ésta sea de uso público y gratuito».

Según la denuncia presentada por los ecologistas, «estas previsiones se están incumpliendo en muchas playas de Málaga y es especialmente grave en aquellas playas como la de Fuengirola, que ya están muy masificadas». La organización señala directamente a la Junta y asegura que ha estado «abusando de sus competencias en la gestión de las playas, mercantilizando la playa a niveles muy peligrosos, desde que se traspasaron las competencias en el año 2011». De igual forma critica la falta de «rotundidad» por parte del Estado a la hora de obligar al cumplimiento de lo previsto en la legislación.

Por ello, Ecologistas en Acción ha solicitado además a Demarcación de Costas que establezca «medidas más rotundas, como la obligación de que todos los proyectos autonómicos en la línea de costa deban ser supervisados por el Estado y sus informes sean vinculantes para las administraciones autonómicas».

Frente a esto, desde la Junta de Andalucía han respondido asegurando que la obra del chiringuito Bikini Beach cuenta con autorización de la administración autonómica para la construcción de un sótano «bajo determinados parámetros o criterios» sobre los que no se han dado a conocer más detalles.

Ante la denuncia realizada por Ecologistas en Acción, fuentes del Gobierno andaluz apuntan que a la zona ya se han desplazado agentes de Medio Ambiente para comprobar «si se ajusta a norma lo ejecutado» y una vez que cuenten con el informe de dichos agentes se comprobará si la denuncia tiene o no justificación. En cualquier caso, desde la Delegación de Medio Ambiente de la Junta de Andalucía «se garantizará siempre el cumplimiento de la legalidad vigente y la autorización concedida«.

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