El hotel de Moneo recibe a sus primeros turistas en un fin de semana al completo

Las habitaciones del H10 Croma Málaga están marcadas por los paneles cerámicos que recubren suelo, paredes y techo. Estos huecos, que quedarán iluminados por la noche, constituyen los elementos más característicos de un edificio de volumen contundente. En tonos azules, verdes y cobrizos, la cerámica ha sido realizada de forma artesanal por una empresa de Granada que es heredera del modo de trabajar del taller sevillano de Mensaque. Son baldosas con relieve cuyos moldes han sido fabricados expresamente para este hotel.

Además, cuenta con un restaurante, un bar para aperitivos en su vestíbulo, otro con terraza en la esquina hacia la calle Prim y otro en la planta del ático, donde se anuncian unas «espectaculares vistas a la ciudad» así como una piscina. Ofrecerá, asimismo, gimnasio, cinco salas de reuniones, y un sótano con 49 plazas de aparcamiento y puntos de recarga para vehículos eléctricos. Otras 171 plazas de garaje en los sótanos del hotel han sido comercializadas por la empresa Costabiler, a la que todavía restan una veintena por adjudicar. Para la apertura del nuevo cuatro estrellas, con el que la capital aumenta su oferta hotelera, la empresa cuenta con más de medio centenar de empleados, a los que se sumarán nuevos profesionales.

La cadena H10 tiene hoteles en México, Cuba y Puerto Rico, Irlanda, Alemania, Italia, Francia y Marruecos. En España dispone de diez establecimientos, dos de ellos en la provincia, sumando el recién estrenado en el corazón de Málaga.