Fuengirola convierte su centro en una Feria Medieval para los más pequeños

Desde las 11.00 horas, las céntricas calles de Condes de San Isidro, San Antonio, y la plaza Reyes Católicos se engalanaron con numerosos puestos, toldos, tapices, disfraces y banderas decorativas, con el fin de que vecinos y turistas se sintieran, aunque fuera por un momento, parte de aquel entorno, en el que por cierto, colaboraron numerosos comerciantes locales.

Pero sobre todo, reinaron las actividades como los talleres infantiles en los que se enseñó a los pequeños fuengiroleños a hacer sus propios caballos de madera y cartón, además de jugar a derribar torres, montarse en una pequeña noria de madera o descubrir los ya prácticamente 'desconocidos' teatros de títeres. Pero no sólo ellos pudieron disfrutar de esta Feria Medieval. El ayuntamiento local se encargó de preparar espectáculos para todos los públicos como pasacalles que pudieron verse a lo largo del día, exhibiciones de aves rapaces como búhos o 'shows' de acrobacias que no dejaron indiferente a nadie y que lograron dar mucha vida al centro del municipio, con cientos de personas expectantes.

A esto hay que sumar también la instalación de alrededor de una veintena de puestos, también decorados con temática de la Edad Media, y en los que comerciantes locales expusieron productos artesanales que no impidieron, eso sí, que el resto de negocios de la zona, fuera accesible al público. Sin duda, una fiesta diferente y con buena acogida que va camino de su décimo aniversario y que sirve para romper con la temática íntegramente navideña de estas fechas y aportar un extra de cultura a los más jóvenes.