

Secciones
Servicios
Destacamos
La avenida Antonio Machado y la avenida del Sol, son lo que antaño fue la N-340 a su paso por el término de Benalmádena: los dos principales ejes que vertebran la costa de este municipio de un extremo al otro. Ya sea a pie o en coche, el paisaje que discurre por ambas avenidas es el de las playas más urbanas, por un lado, y las hermosas y abruptas calas por el otro. Un paisaje que de alguna manera es la imagen del municipio y que se embellece con numerosas zonas verdes a un lado y otro de la carretera y también en la medianera.
Desde el comienzo de este mandato, y con la sequía en su momento más duro, el actual concejal de Medio Ambiente, Juan Olea, señaló a esas zonas verdes como un problema serio para el municipio. Todas ellas se han regado históricamente con agua potable, como la mayoría de los jardines de la localidad, excepto el Parque de la Paloma, que comenzó a regarse con agua regenerada hace aproximadamente un año. El problema es que ante los episodios de sequía, que seguirán llegando a pesar de las lluvias de las últimas semanas, los riegos con agua potable quedan prohibidos. Eso obliga a descuidar una franja verde de una importante extensión, que es además una de las principales imágenes de cara al turismo de sol y playa, que tanta importancia tiene en la economía local.
Con todo esto, el Ayuntamiento ya anunció que su intención era generar una canalización de agua regenerada para que cuando vuelvan las épocas duras de sequía se pueda seguir garantizando el riego en Benalmádena Costa.
El contrato para la ejecución de dicha canalización acaba de ser adjudicado por 855.330 euros (con impuestos incluidos) a la empresa Pavimentaciones Morales, que será la encargada de generar una conducción que vaya desde la estación de tratamiento de aguas residuales (EDAR) de Arroyo de la Miel a toda la franja de la Costa. En total, según los datos municipales, la nueva conducción tendrá una longitud de 8,5 kilómetros.
La previsión es que las obras se prolonguen unos cinco meses, por dicho motivo el concejal explica que, a pesar de estar ya adjudicadas, no comenzarán hasta que finalice la temporada estival, de manera que se llevarán a cabo a lo largo del próximo otoño e invierno. Cuando ya estén terminadas, presumiblemente el Ayuntamiento deberá de pedir los permisos necesarios para poder regar con agua regenerada, tal y como se hizo con el parque de la Paloma. Y cuando esa fase esté superada podrá empezar a regarse toda la costa sin que eso suponga gasto de agua potable.
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Los libros vuelven a la Biblioteca Municipal de Santander
El Diario Montañés
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.