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Había ganas de migas, pero con mucha precaución e incertidumbre por la sexta ola de contagios del Covid-19. Tras el parón obligado por la pandemia en 2020, Torrox esta celebrando de nuevo este domingo, de manera presencial, su fiesta más típica y multitudinaria, aunque ... la afluencia de asistentes está siendo la mitad que en la edición de 2019, con apenas 20.000 personas.
«Por un lado me da alegría volver a estar aquí cocinando las migas para tanta gente, pero por otro pienso que no es el mejor momento», confesó Antonio Núñez, un vecino de 46 años que lleva cinco elaborando el plato típico a base de harina, agua, aceite de oliva, ajos y sal. «El único secreto es removerlas bien, por lo menos durante veinte minutos», explicó sobre la elaboración del enorme perol que ya estaba dispuesto para ser servido entre los que esperaban pacientemente la cola.
Entre ellos estaba María García, una vecina de 53 años, que dijo estar «encantada» por volver a reencontrarse con sus paisanos y amigos en la fiesta más emblemática de su pueblo, declarada de Interés Turístico Nacional y que en este 2021 ha conmemorado su 40.º edición. «Tenemos que vivir, con precaución, pero hay que salir y estar con tu gente, no podemos quedarnos encerrados siempre por el coronavirus», manifestó García.
Pasadas las 14.00 horas eran ya varios miles las personas que esperaban pacientemente su plato de migas acompañado de ensaladilla arriera. «Es una combinación perfecta, y estamos al aire libre, así que el peligro es menor», apuntó Antonio Hidalgo, otro de los visitantes a una celebración que volvió a tener varios escenarios, desde la plaza de la Constitución hasta el Llano de La Almazara, pasando también por El Morche, donde tampoco faltaron las típicas migas.
En total, se emplearon 1.500 kilos de harina de sémola (donados por Pastas Gallo), 200 kilos de harina de trigo, 100 kilos de harina sin gluten, 600 litros de aceite de oliva, 80 kilos de ajo y otros 40 de sal a lo largo de la jornada, una cita que volvió a recuperar su esencia, tras la celebración virtual de 2020, justo el domingo anterior a la Nochebuena y a la Navidad.
Por motivos de salud no acudieron finalmente a Torrox los gaditanos Andy&Lucas, que iban a ser los padrinos de honor de la celebración. Quien no faltó a la cita fue Angelita Villena, quien volvió a dar el toque de caracola desde la plaza que supuso el pistoletazo de salida a la degustación gastronómica. No en vano, este plato típico y humilde es el que se comía en las duras labores agrícolas. Desde hace cuatro décadas Torrox lo reivindica como propio y ofrece esta generosa degustación a todos los que se animan a acudir.
El alcalde, Óscar Medina (PP), destacó que esta fiesta se encuentra ya en todas las agendas culturales internacionales, entre otras cosas, «por mantener la tradición de Torrox, un municipio que ha alcanzado una proyección mundial en los últimos años, conjugando modernidad e historia», dijo. En su intervención tuvo un recuerdo para todos los alcaldes que le han precedido, desde que en 1981 se puso en marcha la fiesta con el socialista Ildefonso Mateos. «Félix Castán, José Pérez, Francisco Muñoz y Toñi Claros, gracias a todos por mantener viva esta fiesta», manifestó.
En la jornada volvieron a tomar protagonismo los tradicionales villancicos y la cultura local, junto a las actuaciones musicales, de diferentes estilos, para amenizar la fiesta, que se celebró en un domingo con intervalos nubosos, aunque con una temperatura agradable, próxima a los 20 grados. «Esperamos que llueva esta próxima semana, hace mucha falta», expresó el alcalde torroxeño.
Las actividades arrancaron sobre las 11.00 horas en la plaza de la Constitución con un encuentro de los coros de Torrox, que hicieron una gran rueda todos juntos para cantar villancicos y posteriormente, ya en el escenario, actuó el grupo local de Coros y Danzas. Los rinconeros hermanos Ortigosa ofrecieron su concierto 'Llegó la Navidad'. Los artistas animaron a los asistentes, justo antes de degustar las migas, la ensalada arriera y el vino del terreno.
La panda de verdiales 'Coto Tres Hermanas' acompañó a las autoridades en su recorrido por las calles hasta el Llano de La Almazara, donde la Charanga 'The Crumbs' amenizó el almuerzo. La música regresó a la plaza de la Constitución, donde el grupo Requiebros, esta vez sí, ofreció el concierto que tuvo que suspenderse en la pasada feria de Torrox debido a la lluvia. Por la tarde la animación la pusieron los Djs Vicman Romero & Mike Sildavia.
El plato principal y que da nombre a esta Fiesta de Interés Turístico Nacional de Andalucía, las migas, de las que también hubo raciones sin gluten, estuvo regado por más de 1.600 litros de vino del terreno. Para elaborar la famosa ensalada arriera, la Asociación de Mujeres de La Almedina empleó 200 kilos de naranjas, 1.500 kilos de tomates, 220 kilos de cebollas, 120 kilos de bacalao y otros tantos de aceitunas.
Para facilitar la llegada de visitantes, el Ayuntamiento habilitó una zona de aparcamiento junto a la gasolinera BP desde donde hubo autobuses, además del horario especial del servicio de autobús urbano, que pasó cada 25 minutos por las paradas habituales. Una jornada redonda en la que Torrox volvió a hacer buenas migas, con el deseo generalizado de que en 2022 pueda alcanzar la cifra de visitantes que hubo en 2019.
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