Secciones
Servicios
Destacamos
La viña moscatel de Alejandría es un cultivo en franco retroceso en la Axarquía, arrinconado cada vez más por los subtropicales. Incluso en pendientes de más de 35%, donde se puede encontrar agua, un bien cada vez más escaso, los vecinos se animan a sustituir ... las viejas vides centenarias por árboles de mangos o aguacates. A pesar de todo, como si de una auténtica aldea gala de Astérix se tratara, en los municipios más altos de la comarca oriental, como Cútar, Moclinejo, Almáchar, El Borge o Iznate, resiste el cultivo, de la mano de unas dos mil familias.
Este mes de abril se cumplen cuatro años desde que la Organización de Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) reconoció a la pasa moscatel de Alejandría de la Axarquía como Sistema Importante del Patrimonio Agrícola Mundial (SIPAM), siendo el primer cultivo de Europa y el único de Andalucía en conseguir este reconocimiento. Para celebrar este cuarto aniversario, este martes han tenido lugar diversos actos en Almáchar, con la asistencia de representantes del Gobierno central, Junta de Andalucía, Diputación y ayuntamientos.
Todas las administraciones se han comprometido a seguir impulsando el plan de acción puesto en marcha el pasado octubre tras la constitución de una asociación con el reto de que no se pierda un cultivo milenario y que hasta hace apenas tres décadas ocupaba la práctica totalidad de la superficie de la comarca oriental. Desde la Diputación han destacado el impulso a proyectos como los paseros automatizados, un museo en Almáchar, centros de interpretación y de estudios en El Borge y Moclinejo, un mirador y un sendero circular por las localidades de Almáchar, Moclinejo, El Borge y Macharaviaya, entre otros.
Los vicepresidentes segundo y cuarto de la institución provincial, Natacha Rivas y Manuel Marmolejo, respectivamente, del PP, han participado en los actos junto al alcalde de Almárchar, Antonio Yuste (PSOE). Los actos han comenzado con la inauguración de la escultura 'Agricultora del SIPAM', del artista Rafael Bravo Hierrezuelo, a quien Rivas ha dado la enhorabuena «por haber elegido a una mujer para esta escultura ya que con ella se reconoce la ardua labor de agricultores, pero sobre todo, agricultoras, esa estirpe de mujeres que fueron pilar y, aún lo son, de nuestra provincia, y que han hecho posible, generación tras generación, que el cultivo de la vid no se haya perdido».
A continuación, en la Casa de la Cultura, se ha proyectado el largometraje documental 'La vid(a)', del director Ezequiel Comesaña, con el que, además de promocionar la uva pasa, se rinde homenaje a José Manuel Díaz Santana, presidente de la Asociación Moscatel e impulsor de la candidatura de la pasa como SIPAM. El documental cuenta cómo un migrante decide regresar a Almáchar, su pueblo natal, y recordar su pasado trabajando en el campo. A medida que visita a diferentes agricultores, el documental va mostrando el proceso de producción de la pasa, casi ajeno a los avances de la agricultura y marcado por la complejidad del terreno, un proceso de producción que se encuentra en peligro de extinción debido a la falta de relevo generacional y a la escasa rentabilidad que obtienen los paseros.
Rivas ha explicado que «este documental tiene que servir no sólo para destacar la labor de los agricultores, sino también para crear conciencia de la necesidad de seguir invirtiendo por productos nuestros, que hacen provincia y que sirven para mantener no sólo tradiciones ancestrales, sino la economía de más de 2.000 familias que viven del cultivo de la uva pasa en los distintos pueblos vinculados a su producción». El documental ha contado con la colaboración de la Diputación, los ayuntamientos de Almáchar y Vélez-Málaga, la Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos de Andalucía, y las bodegas Jorge Ordóñez, Viñedos Verticales y Bodegas Dimobe, además de Axarquía Film Office y Panda Rojo Producciones.
Rivas ha recordado la estrecha relación que existe entre la Axarquía y el cultivo de la vid desde hace más de 3.000 años, y ha destacado el trabajo conjunto de los ayuntamientos para impulsar la promoción y la comercialización de la uva pasa y para poner en valor los recursos turísticos relacionados con ella. En este sentido, ha incidido en la importancia del apoyo institucional para el desarrollo de acciones junto a los ayuntamientos. «La Diputación ha sido, y no me equivoco al decirlo, la administración que más ha creído en este proyecto junto a vosotros, los alcaldes», ha asegurado. «Nuestra apuesta por sacar adelante el plan de acción del SIPAM es firme y decidida, y seguiremos en esta línea con el fin de potenciar este cultivo ancestral, respaldar a nuestros productores y velar por la economía de nuestros pueblos», ha expresado.
En enero de este año, la Diputación se comprometió a financiar la puesta en marcha de paseros automatizados en Almáchar, El Borge y Moclinejo, una experiencia piloto demandada por los ayuntamientos para que los agricultores puedan disponer de la maquinaria que les permita cubrir los paseros rápidamente en casos de inclemencias meteorológicas. Para su instalación se han transferido a cada uno de esos ayuntamientos 5.249 euros y, si resultan ser eficientes, se seguirá adelante con la iniciativa. Además, con el objetivo de poner en valor los paseros desde el punto de vista paisajístico, la Diputación ha previsto crear un mirador o punto de recepción turística en la carretera que une Moclinejo con Almáchar, con una inversión de 153.114 euros.
En Almáchar, la Diputación ha proyectado una iniciativa muy ambiciosa ya que, con una inversión de 765.147 euros, se pondrá en marcha el Museo de la Pasa, un espacio único que permitirá conocer el proceso de cultivo, elaboración y comercialización de la pasa, y que también permitirá al visitante conocer cómo eran las viviendas, la indumentaria y la vida cotidiana de las familias que se dedicaban a esta actividad. En noviembre se adjudicaron las obras.
Además, la Diputación ha posibilitado el acondicionamiento del Centro de Estudios de la Pasa de la Axarquía en Moclinejo y la redacción del proyecto básico para la creación de un Centro de Interpretación de la Pasa en El Borge que contempla la restauración de un lagar y la construcción de un edificio para su uso como bodega, catas y demostración de los procesos de elaboración del vino. «De esta forma, se completará un triangulo turístico y promocional único en la provincia», ha destacado Rivas.
Otro de los proyectos liderados por la Diputación es la creación de un sendero de la pasa y el vino con el que se dotará al territorio SIPAM de una infraestructura para el disfrute de los visitantes de su medio natural y cultural. Será un sendero circular que recorrerá las localidades de Almáchar, Moclinejo, El Borge y Macharaviaya, con un recorrido de 28 kilómetros para que los visitantes puedan disfrutar de su paisaje agrícola singular y conocer el patrimonio etnográfico de la zona, formado por paseros, cortijos y bodegas.
Por su parte, el presidente de la Mancomunidad Oriental, José Juan Jiménez (PSOE), ha destacado que ya han pasado cuatro años desde que administraciones, asociaciones, agricultores y empresarios conseguimos esta distinción tan importante que pone en valor el trabajo de todas las personas del campo que han mantenido y conservado este cultivo ancestral», ha resaltado Jiménez quien también ha recordado que éste «contribuye al paisaje, al desarrollo sostenible del territorio, a la cultura, a la gastronomía, al turismo, y al emprendimiento de nuestros pueblos».
«Ellos lo han mantenido desde hace siglos a lo largo de generaciones, y ahora es nuestro turno. Todos tenemos que contribuir a preservarlo para el futuro y en condiciones dignas para quienes la trabajan. En eso, todas las administraciones tenemos que hacer un esfuerzo. Hemos empezado a creer en la uva pasa moscatel y en crear un proyecto en torno a ella. Cuatro años han pasado y es tiempo de acelerar su promoción, su comercialización y de convertirla en un revulsivo turístico», ha concluido.
Por su parte, la vocal Aroa Palma, de IU, ha incidido en la necesidad de acometer «mejoras para los agricultores y agricultoras» y de «promocionar su consumo poniendo en valor este trabajo laborioso y artesano». «La calidad de nuestras pasas es indiscutible pero eso tiene que revertir en las personas del campo, tenemos que facilitar el camino a los jóvenes para que puedan dedicarse a ella de forma rentable y no de forma subsidiaria», ha añadido la vocal recordando que «las administraciones se comprometieron a impulsar 64 medidas que revertieran en la economía y en el empleo de sus pueblos, y por ende, de sus habitantes».
«Además de motivo de celebración, este aniversario nos debe servir para reflexionar sobre el camino recorrido en estos cuatro años y, especialmente, sobre el camino que nos queda por delante. Debemos ser realistas y no dejarnos engañar: la distinción como SIPAM no ha traído consigo una mejora para los agricultores que hacen posible el cultivo de la uva pasa. Y, sin duda, ese es el gran reto que tenemos por delante. La uva pasa no es sólo un cultivo único de esta tierra; es una tradición milenaria que ha forjado la cultura y la forma de ser de nuestros pueblos», ha reivindicado Yuste incidiendo en la necesidad de que «se impliquen de todas las administraciones, Gobierno central, Junta de Andalucía y Diputación, en la supervivencia del cultivo de la uva pasa». Durante su intervención, el alcalde de Almáchar también ha hecho mención al papel de la uva pasa «para la cultura de sus pueblos y para fijar a la población al territorio».
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.