El río Chíllar de Nerja afronta otro verano sin medidas de control de acceso para frenar la masificación

Esta situación, además del mencionado daño al entorno natural, conlleva que desde hace ya más de una década se sucedan los rescates de excursionistas en el entorno, con una media de una veintena en cada temporada estival. Incluso algunos han sido muy sonados, como el de la holandesa que permaneció 18 días perdidas en la zona más alta del río, en junio de 2011, o el de mayo de 2019, cuando una turista sueca estuvo una noche junto a cinco menores.

Todas iban en chanclas y bañador, habiendo iniciado la excursión desde una urbanización cercana al cauce sobre las 18.00 horas del sábado. Cuando se les hizo de noche, se asustaron y decidieron llamar a emergencias. No las localizaron hasta la mañana siguiente. Estaban bien, pero confesaron que vivieron «una auténtica pesadilla». Con estos antecedentes, el Ayuntamiento nerjeño lleva varios años reclamando a la Junta de Andalucía que dé una solución definitiva a la situación, establecimiento una normativa para el control del acceso.

Fuentes de la Delegación Territorial de Sostenibilidad, Medio Ambiente y Economía Azul en Málaga, que dirige José Antonio Víquez, han asegurado a SUR que «se está trabajando en la planificación, que esperamos esté resuelta en breve». Por su parte, la delegada de la Junta, Patricia Navarro, en un mitin electoral del PP nerjeño que tuvo lugar el pasado 12 de mayo, en el inicio de la campaña electoral para las últimas municipales, también aseguró que la regulación se iba a aprobar «en breve».

A la espera de que se conozcan los detalles de esta planificación, el espacio registra ya desde hace varias semanas un flujo constante de visitantes, sin controles en sus accesos, lo que provoca problemas de masificación, riesgo de accidentes y rescates y daños para un entorno natural protegido, en el que en los meses estivales pueden llegar a agolparse hasta tres mil personas en una sola jornada, con incluso autobuses llenos que descargan excursionistas y empresas que ofrecen la ruta cobrando.

Ante este panorama, el Ayuntamiento nerjeño ha solicitado ya en varias ocasiones a la Junta de Andalucía en los últimos años que adopte «las medidas oportunas en virtud de sus competencias para la regulación, ordenación y gestión integral del espacio asociado a la zona recreativa del río Chíllar». De hecho, en la visita institucional que el presidente andaluz, Juanma Moreno, realizó a la localidad axárquica el pasado enero fue uno de los asuntos que el alcalde, José Alberto Armijo (PP), abordó con él, trasladándole su «preocupación» por la falta de soluciones a esta problemática.

En los distintos acuerdos adoptados por el Ayuntamiento nerjeño se insta a la Delegación Territorial de Agricultura, Ganadería y Pesca, a través del Servicio de Dominio Público Hidráulico (DPH) y Calidad de las Aguas, así como a la Delegación de Desarrollo Sostenible de Málaga, «que actúe de manera urgente con el fin de regular el acceso para minimizar los riesgos derivados de su uso y disfrute», según han apostillado en un comunicado.

«Con esta nueva iniciativa volvemos a pedir a la administración competente que tome las medidas oportunas para que, de una vez por todas, se regule el acceso a este espacio», ha explicado el concejal de Medio Ambiente, Javier Rodríguez (PP), quien ha reiterado la «preocupación» del Ayuntamiento «por el uso sin control que se le viene dando al río y los riesgos que ello conlleva». «Hemos vuelto a situaciones anteriores a la pandemia en cuanto a la afluencia de visitantes, lo que incrementa el riesgo de accidentes, así como el deterioro medioambiental y la problemática ante posibles situaciones de incendios forestales», ha considerado.

«Es por ello que insistimos a la Junta de Andalucía en que tome las medidas necesarias, y una vez más nos ponemos a disposición de la Consejería de Agricultura, Ganadería, Pesca y Desarrollo Sostenible para impulsar cuantas actuaciones estén en nuestra mano», ha finalizado el concejal nerjeño. En una Junta Rectora del parque natural de las Sierras Tejeda, Almijara y Alhama, celebrada el pasado año, la Administración regional comunicó que habían realizado «un estudio de la capacidad de carga del entorno», aunque no concretó cuál era, ni tampoco se avanzó en las posibles medidas a tomar para regular los accesos al cauce.