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Emilio Morales
Málaga
Jueves, 29 de julio 2021, 00:28
El surf está de moda, esto no es noticia, es una afirmación más que tangible. Es por ello que, con el paso del tiempo, todas las provincias costeras han ido incorporando más ocio relacionado con el mar. Málaga siempre ha tardado un poco más, ya ... que no goza de las condiciones de Cádiz para este deporte, eso es una obviedad. No obstante, el San Benito de 'mal lugar para coger olas' es una leyenda que Jorge Palomo y Natalia Castillo, dos malagueños íntimamente ligados con el mar –quien los conoce sabe de su amor por la naturaleza– desmitifican con rotundidad:«Esa leyenda no es cierta. Quizá fue la primera pregunta que nos hicimos antes de montar este proyecto y todo el mundo nos hace. Y la respuesta es un no rotundo. Tenemos muchos días de olas y de olas buenas, que sorprenderían a mucha gente. Nosotros surfeamos y sacamos clases de surf prácticamente todas las semanas, igual podemos tener una racha de una o dos semanas plato, pero por lo general todas las semanas tenemos la oportunidad de entrar al agua y surfear».
Esta pareja de aventureros es la responsable del proyecto Los Feliz Village Yoga & Surf, situado en Rincón de la Victoria, una iniciativa que, según cuentan, tiene inspiración en sus múltiples viajes: «La primera vez que se nos pasó por la cabeza este sueño fue hace cuatro años ya, en un viaje por el norte. Habíamos viajado a muchos destinos de surf como Portugal, Cádiz, Canarias o Indonesia, lugares donde se respira surfing, yoga y naturaleza y su forma de vida. Pero fue en ese momento, en preciosos paisajes y playas del norte donde nos cuestionamos la gran pregunta: ¿y si llevamos esto a casa?».
Fue una decisión meditada, sí, ya que asumen que hay otros lugares que quizá están más acondicionados a actividades de este tipo, sin embargo, quisieron apostar por su ciudad de origen: «Después de pensar, darle muchas vueltas, estudiarlo con mucho tiempo, vimos que Málaga tenía todo para llevar acabo un proyecto así: olas, playas, naturaleza, clima inmejorable, turismo, más afición cada vez al surf, yoga y deportes al aire libre. Además creemos que a pesar de esta gran afición al surf en Málaga no se siente o se vive igual que en lugares como El Palmar o la zona norte y eso es lo que queremos, traer a casa ese estilo de vida», explican con rostros que derrochan ilusión por un sueño que parece que poco a poco se va cumpliendo.
«Tanto en verano como en invierno ofrecemos lo mismo, clases de surf sueltas y cursos mensuales de surf. Para quien quiera más continuidad y seguimiento, vídeo análisis. También rutas en pádel surf. Este invierno próximo, empezaremos con el yoga. Por otro lado, para los mini surfers como nosotros los llamamos, de 10 a 15 años, ofrecemos cursos mensuales durante la época escolar. Ahora, en verano, hacemos nuestros ya famosos 'summer camps'».
Se miran durante la charla con este periódico y se nota la complicidad entre ellos, mientras explican el porqué de la demanda de actividades relacionadas con el surf: «La cultura y estilo de vida que rodean a estos deportes están viviendo un boom enorme en Málaga, quizás eran deportes que no eran muy conocidos y desde hace unos años todo el que lo prueba se engancha», razona Jorge, que lleva más de 15 años de surf a sus espaldas por todo el mundo, entre los que destacan sus inviernos de profesor en El Palmar de Cádiz.
Jorge y Natalia, pese a estar felices por todos los éxitos cosechados hasta el momento, explican que emprender hoy en día es un camino de obstáculos, y no se olvidan de todas las personas que les han ayudado: «Ser emprendedor joven, no es fácil si no tienes dinero. Contactamos con Arrabal, una organización sin ánimo de lucro que ayuda, y no sabéis cuanto, a emprender y gracias a ellos estamos aquí. El camino antes de empezar, el de levantar la persiana ha sido duro, muchos meses de trabajo, estudiando el mercado, elaborando plan de empresa, contactando con proveedores e instituciones o cuadrando cuentas hasta el último céntimo», explican, con el 'handicap' añadido de si todo ese esfuerzo «iba a servir para algo». De momento, y prueba de ello es este propio reportaje, el esfuerzo tiene su recompensa y Los Feliz Village Yoga & Surf es una realidad a la que le queda mucha trayectoria. Sueñen.
Asume que el público objetivo de la provincia no es el mismo que en otras zonas, pero cuenta que en verano cambia paulatinamente: «Cuando empezamos en invierno, por las circunstancias, todo nuestro público era local, ahora en verano, viene gente de otras ciudades y países. Nuestro objetivo es satisfacer, hacer disfrutar en el agua y proporcionar bienestar a través del yoga, al público local por supuesto, pero también al extranjero, que cuando visite Málaga quiera disfrutar y vivir una experiencia con Los Feliz Village».
Tienen claro que seguirán por este camino juntos, y confían en que este auge crezca todavía más: «Son deportes muy bonitos, muy vistosos también. Por un lado el yoga, no es sólo un deporte, como hemos comentado es un estilo de vida. Una forma de proporcionar bienestar físico y mental, de desconectar del estrés del día a día. Por el otro, el mar, con el que si conectas es difícil volverte a ir». Parece ser que esta manera de vivir ha llegado al Rincón para quedarse.
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