El Ayuntamiento de Rincón de la Victoria ha contratado este viernes las obras del proyecto de puesta en valor y recuperación de la Villa Romana de Torre de Benagalbón con la Unión Temporal de Empresas (UTE) formada por Obras Generales del Norte S. A. y ... Copesol S. L., que ejecutará los trabajos con un importe inversor de 892.173,63 euros. La actuación, que cuenta con una subvención por parte del Ministerio de Fomento del 70%, tiene como finalidad «el establecer una zona museística sobre una superficie de 1.026,75 metros cuadrados, que se podrá visitar en tres niveles conectados mediante escaleras, pasarelas y un ascensor con el objetivo de facilitar la accesibilidad», según ha explicado el concejal de Urbanismo y Grandes Proyectos, Miguel Ángel Jiménez (PP).
El alcalde rinconero, Francisco Salado (PP), ha destacado «la gran apuesta del equipo de gobierno por el patrimonio histórico y cultural, que será una realidad mediante este proyecto». Además, el regidor ha apuntado que van «a dotar al municipio de un equipamiento cultural museístico que permita recuperar un testimonio único de la historia local, preservando este legado histórico, y poniéndolo en valor para el uso». En este sentido, el alcalde ha destacado «la magnitud del yacimiento, que junto con el buen estado de conservación de los mosaicos y restos, hacen de éste un lugar de oportunidad para preservar el importante legado histórico de nuestro país y mostrarlo a los visitantes». El yacimiento romano es una lujosa villa en la que destaca un mosaico de Júpiter disfrazado de Sátiro seduciendo a Antíopa, hija de Tebas.
El proyecto de ejecución consta de cuatro fases, que se iniciarán con la excavación y descubrimiento de los restos bajo la supervisión de arqueólogos. Posteriormente, se llevará a cabo la segunda fase que consistirá en la consolidación y restauración de los restos originales, entre los que destacan pavimentos musivarios de gran valor y algunos elementos murarios en considerable estado de degradación. Seguidamente se realizará la reconstrucción de la zona afectada con el objetivo de completar el complejo de forma adecuada, según las cartas de restauración actuales y respetando en todo momento la integridad del monumento», según ha señalado el edil.
En la tercera fase se pondrá en marcha la construcción de las zonas destinadas al museo, como son el vestíbulo, zona de exposición y servicios, y la visita al yacimiento mediante rampas. Por último, se realizará el cerramiento exterior y la ampliación con el espacio del edificio pendiente de construcción al este. Las obras tendrán un plazo de ejecución de doce meses. Hasta un total de siete empresas han presentado sus propuestas económicas al concurso público.
La adjudicataria, con la máxima puntuación alcanzada, ha presentado diversas mejoras entre las que destacan la bajada del precio inicial de licitación que ascendió a 1.000.082,53 euros y finalmente ha sido asignada en 892.173,63 euros, la reducción del plazo de ejecución que de doce ha pasado a diez meses, y también la ampliación del plazo de garantía de las obras en tres años, además de lo legalmente establecido. Dadas las circunstancias actuales, la mesa de contratación se celebró por videoconferencia con la participación de personal municipal del área de Contratación y técnicos, el alcalde, el concejal de Urbanismo, ediles de la corporación municipal, así como representantes de las empresas participantes.
Antecedentes históricos
El yacimiento arqueológico se encuentra en las planillanuras marítimas situadas entre el arroyo Granadillas y el arroyo Benagalbón. Concretamente, a los pies de un pequeño montículo denominado Las Lomas. Aquí se localizan los primeros indicios de poblamiento de este sector costero, concretamente una serie de restos cerámicos fechados para el siglo VII a.C. En 1989, en la citada loma se descubrieron los restos de unas pequeñas termas pertenecientes a una Villa Romana con la aparición de mosaicos y tumbas.
Los trabajos científicos sobre el yacimiento se abren con los estudios de la doctora Serrano Ramos, en los que se presentan los primeros materiales de época romana localizados en el entorno de la Loma. Con la aparición de la Villa Romana se ha establecido una cronología de fundación para todo el complejo en el siglo III d.C. La excavación fue realizada por el arqueólogo Juan Bautista Salado, iniciada en 2003. La Villa Romana es un Bien de Interés Cultural (BIC) con la categoría de monumento, que se encuentra protegido por el Decreto 465/2008, de 16 de septiembre, por el que se inscribe en el Catálogo General del Patrimonio Histórico Andaluz el Bien de Interés Cultural, con la tipología de Zona Arqueológica, denominado Villa Romana del Rincón de la Victoria.
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