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«Dejé el pozo tapado con una piedra». Así de contundente se ha mostrado Antonio Sánchez, responsable de Triben Perforaciones, empresa que realizó la excavación en la que los efectivos intentan rescatar al pequeño Julen, un niño de dos años y medio que, según su ... familia, se precipitó el pasado domingo por un pozo de 107 metros de profundidad y tan solo 25 centímetros de diámetro en la Sierra de Totalán. Sánchez asegura que lleva 40 años haciendo pozos y que nunca ha tenido ningún problema.
Sánchez ha explicado que realizó hace un mes una perforación de sondeo para buscar agua, sin que obtuviera ningún resultado positivo. Tras ello, ha aseverado que acabó el operativo, dejando el pozo tapado con una piedra y con unos cinco mil kilos de tierra -pizarra molida- alrededor del orificio.
El responsable de la empresa ha insistido en que las dimensiones de la piedra que puso para taparlo eran mayores que las del hueco del pozo, quedando sellado, tal y como hacen habitualmente «Lo hice así para que nada se pudiera colar dentro», ha apuntado. Asimismo, ha asegurado que los trabajos contaban con todos los permisos y licencia necesarios para efectuarse.
Además, ha manifestado que, tras visitar la zona para las tareas de rescate, observó que alguien tuvo que quitar esa piedra y que se realizaron movimientos de tierra. «Se abrió una zanja y el pozo quedó al descubierto», ha apuntado.
Sánchez acaba de llegar a la zona donde se encuentra el pozo después de que haya sido reclamada su presencia por la Guardia Civil. Según ha explicado es para colaborar en las tareas de rescate, ya que se va a efectuar un túnel lateral.
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