Nerja hará visitable una central hidroeléctrica que dejó de funcionar en 1965

El alcalde nerjeño, José Alberto Armijo, la concejala de Urbanismo, Nieves Atencia, ambos del PP, y los miembros del grupo asesor del Patrimonio Histórico Local, Francisco Capilla, Pablo Rojo, Juan Bautista Salado y Ángel Ruiz, junto al arquitecto técnico, Antonio Sánchez, han visitado este martes las instalaciones, conocidas como la segunda fábrica de la luz, para coordinar los trabajos de preservación de la maquinaria que se encuentra en su interior, de gran valor para el patrimonio histórico industrial nerjeño.

El Consistorio nerjeño ha anunciado en un comunicado que realizará una intervención en el edificio, recientemente cedido de manera gratuita por la empresa Endesa, para impedir que la actual cubierta caiga sobre la maquinaria. Además, se llevará a cabo la limpieza del interior del inmueble y se realizará un inventario de las máquinas y las piezas que se puedan encontrar.

El Ayuntamiento ha planteado desarrollar «un importante proyecto cultural, turístico y medioambiental» para poner en valor esta zona del municipio axárquico, siendo la primera actuación la transformación de la antigua central hidroeléctrica de San Modesto en un centro de interpretación para conocer la historia de la electricidad en Nerja y en la comarca de la Axarquía. No obstante, desde el Consistorio no han concretado plazos ni presupuesto para esta actuación.

Aprovechando la visita a la antigua central hidroeléctrica, el regidor junto a la concejala de Urbanismo y los miembros del Grupo Asesor del Patrimonio Histórico Local se han desplazado también al inicio del canal que une la instalación con la conocida como tercera fábrica, donde se pretende llevar a cabo la rehabilitación del mismo para su uso recreativo.

Según Rojo, la central de San Modesto fue puesta en funcionamiento en 1917 para dar electricidad a Nerja, Maro, Torrox-Costa y Torre del Mar, entre otras poblaciones, «Estaba interconectada con sus centrales hermanas a través de una línea de transporte de energía», ha explicado el investigador de Frigiliana, quien ha detallado que contaba con dos turbinas de las llamadas «de reacción» tipo Francis, que proporcionaban una potencia conjunta de 275 kilowatios.

«Su salto de agua era de 50 metros de altura. Cuando su hermana mayor, el 'Salto Grande', empezó a producir electricidad con su turbina Pelton de 900 kilovatios, esta central fue quedando poco a poco anticuada, dejando de funcionar hacia 1965», ha apuntado Rojo a través de las redes sociales. Para este investigador, las instalaciones «constituyen un ejemplo único de patrimonio industrial hidráulico en la provincia de Málaga». «Enhorabuena a Nerja por recuperar una parte importante de su historia», ha apostillado Rojo.