El nacimiento del río Guaro 'revive' tras las últimas lluvias

No en vano, este acuífero, junto a otros ríos con los que se une más abajo, como el Sabar, que desciende desde Alfarnate y Alfarnatejo, constituye el principal aporte a la presa de la comarca oriental, que en estos días ha visto incrementadas sus reservas en casi diez hectómetros cúbicos, hasta alcanzar los 63,1, lo que supone el 38% de su capacidad. «Es todo un espectáculo, es una pena que estemos en esta situación, pero bueno, dentro de lo malo, es una gran alegría que el acuífero se haya recuperado de esta forma», ha asegurado el alcalde perianense, Rafael Torrubia (PSOE).

Cuando este acuífero 'resucita' es sinónimo de que otros de la zona, que están a una menor altitud, también se han recargado, según ha explicado el regidor. «Llevábamos un año bombeando agua de los pozos para poder abastecernos en el pueblo, y ahora ya por fin las bombas se han parado y el suministro llega por gravedad. En los 48 años que tengo nunca recordaba que hubiéramos estado tanto tiempo seguido bombeando agua. Menos mal que ha llovido y bien, han caído unos 180 litros en apenas una semana», ha descrito Torrubia.

No obstante, el regidor de Periana ha explicado que hay que concienciarse de la necesidad de ahorrar agua, al tiempo que se realiza una adecuada planificación hidrológica de los recursos existentes en la zona. «Con estas lluvias ya no será necesario regar en más de un mes, pero las reservas del pantano siguen estando muy por debajo de como estaban hace ahora un año», ha argumentado el alcalde. Hace 12 meses el pantano acumulaba casi 12 hectómetros cúbicos más, con 75.