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El fantasma de la sequía sigue amenazando a la Axarquía, donde el sector de los subtropicales se enfrenta a un panorama ciertamente apocalíptico, equiparable, salvando las distancias históricas, a la ruina que supuso la plaga de la filoxera a finales del siglo XIX para los ... cultivos de vid moscatel. Con un embalse de La Viñuela a apenas el 15,4% de su capacidad, con 25,4 hectómetros cúbicos almacenados, el abastecimiento de la población y el riego de buena parte de las 13.000 hectáreas de aguacates y mangos que se estima que hay en la comarca oriental, pueden verse seriamente afectados en los próximos meses si continúa sin llover.
Ante este panorama, la Junta de Andalucía, que desde junio pasado tiene en vigor un decreto de sequía para la zona, y está ejecutando obras para usar las aguas regeneradas para el regadío y aumentar la capacidad de trasvase de agua potable desde la capital malagueña, ha puesto sobre la mesa uno de los grandes proyectos del que se viene hablando desde hace años, la construcción de una desaladora.
Así, la consejera de Agricultura, Ganadería, Pesca y Desarrollo Sostenible, Carmen Crespo, ha trasladado este viernes al secretario de Estado de Medio Ambiente, Hugo Morán, la necesidad «urgente» de acelerar las obras hidráulicas de interés general del Estado para paliar los efectos de la sequía en Andalucía, entre las que se incluiría esta ambiciosa actuación, de la que aún no se conoce el coste ni los plazos.
El mes pasado el alcalde de Vélez-Málaga, Antonio Moreno Ferrer (PSOE), anunció que había mantenido en los últimos meses varias reuniones con inversores privados interesados en ejecutar una desaladora en la zona. De hecho, dijo que la mayor dificultad era encontrar un suelo adecuado. Desde las organizaciones agrarias, como Asaja, llevan años reclamando este proyecto como solución para el sector agrícola de la comarca oriental y denunciando que se viene recogiendo en los planes hidrológicos sin que se ejecute, junto a otros proyectos frustrados como el recrecimiento del embalse de La Concepción, en Marbella, para aumentar su capacidad de almacenamiento, cifrada en apenas 62 hectómetros cúbicos.
Durante la reunión, en la que también han participado el secretario general de Medio Ambiente, Sergio Arjona, el director de Infraestructuras del Agua, Álvaro Real, y el director general de Planificación y Recursos Hídricos, Fernando Delgado, la consejera ha reclamado la ejecución de la mencionada desaladora de la Axarquía, así como la mejora y ampliación de la existente en Marbella.
Durante la reunión por videoconferencia mantenida con el alto cargo del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico la consejera andaluza también ha reclamado la posibilidad de participar en el diseño y ejecución del Proyecto Estratégico para la Recuperación y Transformación Económica (PERTE) de digitalización del sector del agua, no sólo como comunidad autónoma sino como organismo de cuenca.
Además, se ha recordado al Gobierno que la Junta tendrá redactado el proyecto de la nueva presa de Gibralmedina, en la provincia de Cádiz, antes de que termine 2022 y que el Estado debería incluirla como parte de las actuaciones prioritarias en el horizonte de 2027, dada su importancia para garantizar el abastecimiento en el Campo de Gibraltar y en la Costa del Sol.
«La escasez de lluvias continúa y la situación de sequía en nuestra comunidad supone una gran amenaza porque las reservas de nuestros embalses se están reduciendo de manera muy significativa. Ello hace necesarias inversiones excepcionales por parte de las administraciones», ha explicado Crespo en un comunicado. «La Junta de Andalucía, merced a la aprobación en el mes de junio del decreto de sequía, ha iniciado obras de emergencia en las zonas más afectadas de las cuencas intracomunitarias, que son aquellas sobre las que tiene competencias». Pero no es suficiente, de ahí que la consejera haya insistido en que «desde el Ministerio se acometan las obras declaradas de interés general de la Comunidad Autónoma, básicas para garantizar las demandas de los territorios de Andalucía».
Dentro de esas infraestructuras, Junta y Gobierno de España han analizado las fechas y plazos de las desaladoras almerienses de Carboneras, Bajo Almanzora y del Campo de Dalías, así como la conveniencia de ejecutar cuanto antes la conducción de Tabernas-Venta del Pobre, una actuación declarada de interés general del Estado, y asegurar la dotaciones procedentes del trasvase Tajo-Segura, todo ello en la provincia de Almería. Por otra parte, se ha reclamado información sobre el plan del Gobierno para ejecutar las conducciones de las presas de Rules en Granada y Siles en Jaén. Igualmente, la consejera ha instado al secretario de Estado a la aprobación del trasvase de Iznájar al norte de la provincia de Málaga para poder avanzar en la redacción del proyecto y posterior ejecución de la obra.
En la provincia de Huelva, la Junta de Andalucía ha reclamado una decisión por parte del Estado para la finalización de la obra de la presa de Alcolea, que siguen estando pendiente del informe del Cedex. Hay que recordar que ésta es aun obra clave para garantizar los recursos hídricos de la Demarcación Hidrográfica del Tinto, Odiel y Piedras, así como para dar cumplimiento a la ley del trasvase del Condado. Por último, se ha solicitado que se constituya de manera urgente la comisión del trasvase que recoge dicha ley.
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