La Junta asegura que el abastecimiento de agua en la Axarquía está garantizado para un año aunque no llueva

Esto va a ser posible, por un lado, por la decisión histórica, adoptada por primera vez por la Junta, de cortar por completo el agua que se suministraba del embalse a las 6.306 hectáreas de cultivos del Plan Guaro, las situadas por debajo de la cota de 140 metros de altitud sobre el nivel del mar. Con ello, la poca agua que queda en la presa viñolera se reserva para el abastecimiento humano, «que es la prioridad absoluta», según remarcó este martes el delegado de Agricultura y Recursos Hídricos de la Junta en Málaga, Fernando Fernández, en una visita al centro de explotación del embalse viñolero, acompañado de la delegada de la Junta en Málaga, Patricia Navarro, del presidente de la Mancomunidad Oriental y alcalde de La Viñuela, José Juan Jiménez (PSOE), y del vicepresidente de la entidad y regidor de Iznate, Gregorio Campos (PSOE).

«La comisión de gestión de la sequía sacó del estado de excepcional sequía al sistema del Guadalhorce-Limonero, al haber empezado el año hidrológico con un superávit de 1,8 hectómetros cúbicos», explicó Fernández, quien dijo que la capital tiene reservados más de 50 hectómetros cúbicos de los embalses del Guadalhorce para el abastecimiento durante este año y 39 se destinarán al regadío del Guadalhorce, la misma cantidad que el pasado año.

Al mismo tiempo, se continuará trasvasando agua para abastecimiento desde la capital malagueña hasta la potabilizadora de El Trapiche, a razón de 320 litros por segundo, a través de la estación de bombeo de La Rosaleda. A estos recursos se sumarán «en unas semanas» hasta 150 litros por segundo de dos de los tres pozos del río Chíllar de Nerja, lo que supone hasta 4,73 hectómetros cúbicos al año. «El abastecimiento en la Axarquía está garantizado para el año hidrológico», apostilló Fernández.

Respecto al regadío, preguntado porqué hace 14 años, cuando el embalse se quedó con apenas 15 hectómetros cúbicos el 30 de octubre de 2008, no se llegó a cortar el agua a las fincas, el delegado de Agricultura aseguró en que «no lo sabía». «Tendría que preguntárselo a las circunstancias y condiciones que se dieran. Ahora mismo hay 16 hectómetros cúbicos en el pantano, está a un 10% de su capacidad, tenemos que velar y garantizar para que este año hidrológico no falte el suministro a la población», argumentó.

Fernández puntualizó que si se produjeran lluvias, «la situación cambiará de manera inmediata, se harían riegos de emergencia». El delegado desveló que están estudiando la petición de los regantes y de la Mancomunidad Oriental de recurrir a pozos de emergencia en desuso tras la entrada en funcionamiento de la presa.

Por su parte, la delegada de la Junta volvió a hacer un llamamiento a la población a realizar un consumo responsable del agua, «que es oro», consideró. A los ayuntamientos les pidió además que «se esfuercen» en realizar inversiones para acabar con las fugas de agua y pérdidas en las redes, que pueden ser de hasta el 40%.

Navarro defendió que están invirtiendo en Málaga 61 de los 141 millones de los dos decretos de sequía, con obras para aportar 20 hectómetros cúbicos para el regadío de la Axarquía. «Hemos actuado desde el minuto uno, teniendo en cuenta que vamos con 15 años de retraso. Anteriores gobiernos socialistas no previeron las infraestructuras necesarias ni han revisado las que hay y hemos tenido que afrontar todo a la vez y con una sequía pertinaz que nos ha obligado ya a prohibir el uso de agua para riego en la Axarquía«, manifestó Navarro.

La delegada de la Junta instó al Gobierno de España a «implicarse en la lucha contra la sequía», al tiempo que hizo un llamamiento a la ciudadanía en el uso responsable del agua para restringir su consumo, así como a los ayuntamientos y mancomunidades para actuar sobre las infraestructuras que son su competencia en busca de una mayor eficiencia. «Todos debemos ser conscientes de la situación tan perentoria que estamos viviendo y la escasez de agua que afrontamos, considerando que el agua que sale por el grifo es oro», insistió.

La delegada aseguró que con los dos decretos de sequía Andalucía ha invertido 141 millones de euros, contando solo con el 33% del territorio en materia hídrica (cuencas Mediterráneas, Guadalete-Barbate y Tinto-Odiel-Piedras), «mientras que el Estado, para el Guadalquivir, con competencias en el 67% restante de la comunidad autónoma, ha puesto en marcha un decreto de sequía con 9,6 millones de euros», argumentó.

Los decretos de sequía de la Junta en Andalucía rozan el 50% de ejecución y aportarán casi 73 hectómetros cúbicos de agua, según la Junta. La recién creada Comisión de Seguimiento de la Sequía para Andalucía estudia, además, los fondos Next Generation que necesita la comunidad ante la sequía persistente, «como por ejemplo para destinar más recursos para evitar la pérdida de fugas en redes de abastecimiento de municipios de menos de 20.000 habitantes o para desalación; estamos actuando para frenar la pérdida de agua en infraestructuras sin revisar en 40 años», según Navarro.