Vista panorámica del casco urbano de Canillas de Aceituno. SUR

Inversores privados proyectan un complejo ambiental para el reciclaje en Canillas de Aceituno

La empresa de Vélez-Málaga Altos de Canillas S. L. prevé invertir 2,2 millones en la ejecución de un recinto de 30 hectáreas junto a la carretera comarcal

Jueves, 21 de noviembre 2024, 00:02

El reciclaje se ha convertido en uno de los grandes desafíos del mundo occidental, en el que los residuos se acumulan por doquier. Por ello, el principio de las 'tres erres', reciclar, reducir y reutilizar, lleva ya muchos años difundiéndose entre la población. Las normativas ... medioambientales que promulgan acuerdos como el de la Agenda 2030 persiguen precisamente potenciar el reciclaje de residuos y reducir la huella ecológica.

Publicidad

Con estos principios, la empresa Altos de Canillas S. L., con sede social en Vélez-Málaga, ha puesto en marcha un proyecto para crear un gran complejo medioambiental de recogida y reciclaje de residuos no peligrosos en el paraje conocido como Lomilleja de Mingana, Cardal y Loma Cuchiche, en el término municipal de Canillas de Aceituno. La iniciativa ha sido redactada por el arquitecto Francisco Javier Blanco y fue presentada ante la Junta de Andalucía en 2019. Plantea una inversión privada de 2,2 millones de euros.

La Administración regional publicó el pasado 7 de noviembre un acuerdo de la Delegación Territorial de Agricultura, Pesca, Agua y Desarrollo Rural en Málaga, por el que se abre un periodo de información pública del expediente para este proyecto de actuación, dentro de la tramitación para otorgar la correspondiente autorización para las obras y construcciones en la zona de policía. Los interesados pueden presentar alegaciones a la actuación.

A través de las redes sociales este periódico ha comprobado que los vecinos del entorno de Canillas de Aceituno han comenzado a movilizarse, con una recogida de firmas, en contra del complejo ambiental. Son ya más de 250 los vecinos que se han agrupado. Preguntado al respecto, el alcalde canillero, Vicente Campos (PP), ha asegurado a SUR que «no tiene información» respecto a este proyecto. «Sé lo mismo que los vecinos, cuando lo vea me pronunciaré», ha manifestado. Cabe recordar que en Canillas de Aceituno lleva paralizada desde hace más de dos años la única planta de tratamiento de escombros que había en la Axarquía, tras recibir una sanción de la Junta de Andalucía 250.000 euros, que está recurrido, tal y como ya informó SUR.

Publicidad

Distribución

El proyecto contempla una actuación en una finca de 30,67 hectáreas, de fuertes pendientes, situada junto a la carretera de acceso a Canillas de Aceituno. La parcela sobre la que se proyecta la actividad es de forma irregular y cuenta con una orografía abrupta, en su mayoría se encuentra sin uso agrícola, siendo pasto la mayoría de las especies. Los suelos están catalogados como no urbanizables. Sobre la idea de negocio, los promotores plantean que «surge de la mayor demanda de un centro de reciclaje de distintos materiales e incluir un centro de investigación respecto al reciclaje de diferentes materiales, la escasez de este tipo de centros y el interés por la sostenibilidad y el medio ambiente, hace viable el presente proyecto».

Con la instalación proyectada en Canillas de Aceituno «se pretende compatibilizar la sensibilidad social respecto a las condiciones ambientales del medio físico y los nuevos conceptos de reciclaje y reutilización de los residuos originados en las obras de construcción en sustitución de materiales obtenidos a partir de la explotación de recursos naturales, disminuyendo el impacto ambiental que ello supone».

Publicidad

Imagen de la distribución del complejo medioambiental proyectado en Canillas de Aceituno. SUR

Las instalaciones contarían con las siguientes zonas: administrativa y educativa, investigación, recogida y tratamiento, vertedero, acceso y aparcamientos. Así, en los planos que se reproducen en el proyecto se detallan zonas separadas para el almacenamiento y reciclaje de residuos de la construcción y demolición, biorresiduos, lodos, voluminosos, electrodomésticos, plásticos, chatarras, vertedero, mirador, administración y educación. La superficie total de estancias construidas es de 593 metros cuadrados.

Las instalaciones contarán con un depósito prefabricado de una capacidad de 50 metros cúbicos de agua. Para realizar las labores de reciclaje, clasificación y almacenaje del material, se dispondrá de maquinaria, con excavadora hidráulica de cadenas, dotada de martillo hidráulico, pulpo y cazo de cambio rápido; pala de ruedas, machacadora móvil de mandíbulas sobre cadenas, alimentador vibrante 'grizzly', tolva, cintas de producto y lateral de finos; separador magnético, conducto de alimentación de la planta y aspersores para la supresión de polvo.

Publicidad

Impacto paisajístico

El plazo de ejecución del proyecto, una vez que obtenga todos los permisos burocráticos, es de entre dos y tres años, según estima el arquitecto redactor. «Esta actuación se enmarca en las actuales políticas tanto de la Junta de Andalucía, como el Gobierno de España para el fomento del reciclaje y la sostenibilidad. Dada la naturaleza de la edificación, su situación respecto al municipio y el interés público por esta actividad, no existe ninguna duda sobre la implantación de este tipo de actividad en suelo no urbanizable», señalan el profesional que ha elaborado el proyecto del complejo ambiental.

Para el arquitecto redactor, «la modificación del paisaje es totalmente inevitable, durante la vida útil del complejo medioambiental». «Las zonas de acumulación y clasificación, la instalación de maquinaria de reciclaje, la presencia de maquinaria pesada y tránsito de camiones, la edificación de una nave y la acumulación de residuos, son elementos que alteran la configuración paisajística actual», sostiene Blanco.

Publicidad

No obstante, a su juicio, «el impacto paisajístico solo será apreciable en un entorno próximo de la planta de reciclaje, puesto que se diseña la actuación en dos niveles separados por un talud no superior a los cuatro metros con el fin de quitar la visión exterior de la maquinaria». En todo caso, el arquitecto propone que, «para evitar un impacto mayor visual desde el exterior, la acumulación de residuos, tanto en la fase de valoración como en la fase de depósito una vez reciclados no podrán tener una altura superior a los 2,5 metros, con una inclinación de talud no superior a los 45 grados».

Críticas de los ecologistas

Por su parte, el portavoz del Gabinete de Estudios de la Naturaleza (GENA)-Ecologistas en Acción, Rafael Yus, ha valorada este proyecto de centro ambiental de residuos. «Todo lo que sea control de residuos, y mejor aún, si se recicla y entra en la economía circular, es bendecido por nuestra organización, que lleva años denunciando la dejación que hay sobre este tema», ha expresado. Ahora bien, el biólogo veleño ha considerado que la ubicación «es malísima, y que lo que va a provocar es que se sigan deshaciendo de los escombros en cualquier parte que les pille cerca».

Noticia Patrocinada

A su juicio, «lo ideal es que esta planta la hicieran en Vélez-Málaga, por ejemplo en la zona de Las Campiñuelas, por donde estaba la fábrica de ladrillos de El Prado«. «Pero claro, esto les costará mucho más caro que esas tierras de Canillas de Aceituno, que por no tener no tienen ni cultivos ni matorral, con pendientes enormes, valles que irán rellenando de escombros, logrando así orografías llanas para propiciar cultivos subtropicales», ha manifestado Yus, quien sobre esto último ha matizado: «Esto es una suposición basada en lo que se ha hecho en otros lugares de la comarca».

Este contenido es exclusivo para suscriptores

Suscríbete durante los 3 primeros meses por 1 €

Publicidad