Expedientan a una urbanización de Nerja por tener una depuradora propia no conectada a la red

Por ahora, es el Ministerio de Agricultura el que, a través de la empresa pública Tragsa, se está encargando de su mantenimiento y uso. Desde el Consistorio nerjeño, gobernado por el PP con mayoría absoluta, vienen oponiéndose a tener que pagar hasta once millones en 25 años para asumir la gestión de la primera Estación Depuradora de Aguas Residuales (EDAR), cuya construcción supuso una inversión que rondó los 26 millones de euros, financiados íntegramente por el Gobierno central, al ser una obra declarada de Interés General del Estado.

El Ayuntamiento también se ha venido quejando de los problemas de malos olores y ruidos que provocan las instalaciones desde su puesta en marcha. Sin embargo, tras una exhaustiva investigación, el Ministerio detectó que las quejas por los olores procedían de una pequeña estación de tratamiento autónoma que tenían varias urbanizaciones situadas en las inmediaciones de donde se ejecutó la planta de tratamiento, en el extremo oriental del casco urbano.

Así, el Consistorio ha abierto un expediente a las urbanizaciones Fuente del Badén y Vía Romana Casas Adosadas, que suman alrededor de 60 inmuebles, por la existencia de estas instalaciones que incumplen las normativas vigentes, obligándoles a conectarse inmediatamente a la red municipal. Para ello, el Ayuntamiento notificó a finales del pasado mes de febrero a los residentes que, «a la vista del acta policial procede abrir una orden de ejecución y proceder a la clausura de esta instalación, máxime cuando, además de la inspección realizada por la Unidad de Policía Administrativa ha sido comunicada la misma situación por parte del Ministerio de Transición Ecológica».

Así consta en una resolución administrativa que ha sido notificada a estas dos comunidades de propietarios, a la que ha tenido acceso SUR. En el documento se le da un plazo de «dos meses» para ejecutar los trabajos para conectar el saneamiento de estos inmuebles a la red municipal, para proceder al desmantelamiento de las instalaciones de la depuradora propia, que data de hace unos 40 años, según ha podido saber este periódico. Al parecer, se trata de un sistema de tratamiento muy básico, que separa los lodos y los sólidos, vertiendo directamente las aguas residuales a un arroyo cercano.

Para acabar con esta situación, el Ayuntamiento nerjeño sostiene que «procede requerir a la empresa municipal de aguas, Aguas de Narixa, que recabe información en dos sentidos: facilitar el punto de conexión y procedimiento de injerencia a la red municipal en base al punto y cota del vertido. Facilitar un listado exhaustivo de las viviendas del entorno afectado que, aún disponiendo de abastecimiento domiciliario de agua, carecen de conexión a la red de saneamiento o se desconoce su existencia. Puede recabarse información de las empresas de desatoros locales al objeto de recabar esta información».

De esta forma, según asegura el decreto que firma la concejalía de Urbanismo, «a la vista de la distancia existente entre la estación de depuración origen de este expediente y el saneamiento municipal, se estima que los costes de injerencia ascienden a la cantidad de 125.000 euros y pueden ejecutarse estos trabajos en un plazo no superior a 20 días, pasado el cuál propongo ejecutarlo con medios municipales con cargo a los responsables de la instalación».

El decreto municipal detalla que los trabajos consisten en «el tendido de una tubería de polietileno de 110 milímetros de diámetro, a ubicar por el lindero de las viviendas, conectando la estación y la carretera, hasta el colector municipal, en el punto de conexión y con la forma indicada por Aguas de Narixa». «En la estación de depuración se instalará un equipo de bombeo de agua residual estanco y se conectarán la entradas actuales con un sistema de desbaste previo. Se limpiarán los lodos y residuos de la instalación, procediendo a su vertido a través de una empresa autorizada para ello procediendo al desmantelamiento de la instalación existente».

Igualmente, el informe advierte de que si la estación de bombeo requiere de un punto de vertido por desbordamiento al Dominio Público Hidráulico (DPH), «el titular o titulares de la misma tendrá que solicitar autorización al organismo competente de cuenca». A pesar de que el Ayuntamiento de Nerja otorgó un plazo de dos meses a las comunidades de propietarios para ejecutar estos trabajos, que ya habría expirado, los mismos no se han iniciado, según ha podido constatar SUR.

En caso de no hacerlos, será el Consistorio el que los ejecute de manera subsidiaria. Eso sí, en el decreto notificado a los vecinos, el Consistorio advierte de que «el incumplimiento de los deberes de conservación de terrenos, urbanizaciones, edificios e instalaciones establecidos en la legislación autonómica, la LISTA, o de acuerdo con ella y el incumplimiento de las órdenes de ejecución, se considera infracción urbanística grave, pudiendo ser sancionada con multa de 3.000 a 29.000 euros».

Por su parte, el concejal de Urbanismo e Infraestructuras, José Alberto Tomé (PP), ha asegurado que están en conversaciones con las dos comunidades de propietarios para solucionar este asunto. Así, el edil nerjeño ha apuntado que están a la espera de poder acceder a las instalaciones de la depuradora privada para evaluar técnicamente los trabajos a ejecutar, que serán asumidos íntegramente por el Ayuntamiento nerjeño.