La Cueva de Nerja suscribe un préstamo de 900.000 euros ante la falta de liquidez

Como todos los monumentos y espacios culturales y patrimoniales de la provincia, la Cueva de Nerja tuvo que cerrar sus puertas el pasado 14 de marzo debido a la pandemia del coronavirus. Dos meses y medio después, reabrió el pasado 1 de junio, pero el flujo de visitantes está siendo de apenas un 10% del habitual en estas fechas si no hubiera una crisis sanitaria.

Así, durante una semana la cavidad únicamente recibió visitas de la provincia. Desde el pasado lunes, con la ampliación de la movilidad a toda Andalucía, el flujo se ha incrementado ligeramente. Sin embargo, la brusca caída de los ingresos por el cierre ha obligado a la Fundación que gestiona el monumento a solicitar un préstamo de 900.000 euros para disponer de la liquidez necesaria para garantizar el pago de salarios a la plantilla, de casi 40 empleados.

El crédito se ha concedido dentro de los planes del Gobierno central, a través del Instituto de Crédito Oficial (ICO), con un año de carencia y cinco años para su devolución. La gruta aprobó el pasado diciembre un presupuesto de seis millones, un 15% más que en 2019, con una partida de 1,7 millones para inversiones.

La reapertura de la gruta se ha realizado con importantes medidas de seguridad e higiene, con controles de temperatura en la entrada. Los visitantes entran por unidades familiares, con un máximo de 180 personas cada hora. «Esperamos que a partir de este fin de semana y sobre todo del 1 de julio, con la apertura de las fronteras, la situación mejore«, dijo ayer a SUR el gerente de la cavidad, Chema Domínguez.

Sobre el Festival Internacional de Música y Danza, que este año celebraría su 61.º edición, y para el que se habían reservado 350.000 euros, está previsto que el presidente de la Fundación y subdelegado del Gobierno en Málaga, Teófilo Ruiz, anuncie hoy la decisión definitiva en un acto en el que se conmemorará el 60.º aniversario de la apertura. Por la gruta han pasado 18,6 millones de personas.