El confinamiento en Nerja: calles desiertas y negocios cerrados

«Hemos salido a dar un paseo y nos han ordenado volver al apartamento, iremos a comprar algo de comida», han explicado este domingo en el Balcón de Europa Paul y Judy Veness, dos británicos jubilados que llevan dos semanas en Nerja, localidad a la que acuden de vacaciones un par de veces al año desde hace una década. «La situación es muy extraña, no sabemos si podremos volver a nuestro país dentro de dos semanas, cuando tenemos el vuelo de vuelta«, han confesado estos jubilados, que han admitido que están »muy preocupados y asustados«. »Nos da mucha pena ver cómo está el pueblo, sin gente en la calle y los negocios cerrados, el que esté en un apartamento puede cocinarse, pero ¿y los que están en hoteles y solo tienen contratado el desayuno?«, ha reflexionado Judy.

Cuando la conversación apenas lleva un minuto, una patrulla de la Policía Local aconseja a este periodista alejarse al menos un metro de los turistas «por seguridad», remarcan por la megafonía del vehículo. La estampa de agentes de la Policía Local, Guardia Civil o Protección Civil desalojando a la gente de las calles se repite en los otros grandes municipios de la Axarquía. En Rincón de la Victoria un par de negocios han desobedecido las órdenes de las autoridades y han abierto sus puertas, siendo cerrados inmediamente por la Policía Local, según han informado fuentes municipales a este periódico. De momento, se está informando de las restricciones a la libre circulación de personas, pero no se están imponiendo multas. «Es el día 1», remarcan.