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París es la ciudad del amor. La capital gala presume de ser una de los principales destinos turísticos del mundo. Para los que no puedan permitirse el lujo de viajar hasta allí, tienen este verano una opción mucho más asequible. No es lo mismo, pero, ... como consuelo, sí tiene un aspecto y un sabor mucho más apetecible. El maestro chocolatero sevillano Álvaro Romero, de 35 años, ha vuelto a sorprender con su genialidad, al recrear con 1.500 kilos de la dulce tentación, varios de los edificios y lugares más emblemáticos de la ciudad francesa.
Lo ha ha hecho en su local de Choco Expo, en la céntrica calle Princesa de Torre del Mar. Es la tercera exposición temporal de este tipo que exhibe en este espacio, tras las del Titanic, el pasado verano, y el Belén de Chocolate, estas pasadas navidades. «Pasión, dedicación y muchas horas de trabajo», confiesa Romero que son los ingredientes que añade a unas creaciones que no se pueden comer porque aunque el chocolate es auténtico, le añade productos para evitar que se derritan. Además, tiene que mantener unas condiciones de temperatura y climatización en el establecimiento por el mismo motivo.
La muestra puede verse hasta el próximo 30 de septiembre en el céntrico local comercial, en horario de 10.30 a 13.30 y de 17.30 a 21.00 horas, todos los días de la semana. Con la entrada se regala un obsequio en forma de helado de crocanti que hace las delicias de los asistentes. «Son más de 20.000 horas de trabajo en total, es todo absolutamente artesano, hecho pieza a pieza por mí», cuenta Romero.
En el establecimiento es posible encontrar, eso sí, y adquirir, un amplio surtido de sus chocolates, así como globos sorpresa, piruletas, turrones, frutas y frutos secos bañados en chocolates. Además de numerosos turistas, la exposición de este París dulce y en miniatura, que invita a comérselo aunque no sea posible en la práctica, está siendo visitada por numerosos grupos de menores, que participan en campamentos estivales.
El río Sena hecho con frutos secos, la icónica Torre Eiffel, el Museo del Louvre con su cúpula de cristal, el castillo de Disneyland... No faltan ninguno de los emblemas de la capital gala. La fantasía y la creatividad de Álvaro Romero no paran y ya está pensando en una nueva exposición, tanto para las próximas navidades como para el verano de 2024.
«La verdad es que estamos muy contentos con la respuesta del público está siendo magnífica en Torre del Mar», asegura este empresario, con sede central en la localidad sevillana de Estepa. La empresa Choco-Expo la fundaron hace dos décadas sus padres, Paco Romero y María del Carmen Martín.
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