Imagen de la planta, en la que el Ministerio ha invertido 25 millones de euros. E. CABEZAS

La cesión de la depuradora al Ayuntamiento de Nerja se retrasa un año

El Ministerio tramita una mutación demanial de las instalaciones, que han terminado la fase de pruebas, tras una inversión de 25 millones de euros

Lunes, 5 de julio 2021, 00:24

Este verano es el primero en el que Nerja ha dejado de tener el dudoso honor de haber sido durante varias décadas el único gran municipio de la Costa del Sol que aún no depuraba sus aguas residuales, a pesar de tener una población flotando ... de casi 80.000 personas en temporada alta. Desde el pasado octubre, la primera Estación Depuradora de Aguas Residuales (EDAR) de la localidad axárquica ha estado en fase de pruebas, un periodo que inicialmente estaba previsto que finalizase el pasado abril.

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Sin embargo, a pesar de haberse superado ya esta fase de pruebas, la cesión al Ayuntamiento de la planta depuradora, las dos estaciones de bombeo y los colectores y emisarios, en los que el Gobierno central ha invertido unos 25 millones de euros, se retrasará todavía alrededor de un año. Así lo anunció en una reciente entrevista en la televisión local Telenerja el alcalde, José Alberto Armijo (PP), en la que explicó que el Ministerio para la Transición Ecológica ha cambiado el planteamiento inicialmente previsto para ceder la depuradora al Consistorio, que será la encargada de su gestión, previsiblemente a través de la empresa pública Aguas de Narixa S. A., participada al 50% entre el Ayuntamiento y Aqualia.

Así, se está tramitando un expediente administrativo de mutación demanial para ceder al Consistorio no sólo las instalaciones para su uso y explotación, sino también la titularidad de las mismas. «Se va a alargar en el tiempo, mientras, durante un año aproximadamente, el Ministerio va a seguir explotando la planta en tanto en cuanto se culmina el expediente de titularidad y explotación al Ayuntamiento», explicó.

Desde que se puso en marcha en pruebas, con un retraso de casi cinco años con respecto a la fecha inicialmente prevista cuando se adjudicaron las obras en 2013, se han generado quejas de vecinos del entorno de la planta y de las estaciones de bombeo por ruidos y malos olores. A este respecto, el alcalde reconoció esta situación y su «preocupación» y explicó que tienen «el compromiso del Ministerio de corregir estas incidencias». «Tienen la responsabilidad de hacerlo, esperamos que cuando se proceda a la entrega estén en un adecuado estado de funcionamiento», apostilló.

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Subida del recibo del agua

Respecto al posible incremento del recibo del agua y la depuración cuando la planta de tratamiento ya sea gestionada por el Consistorio, el regidor reconoció que subirá, aunque no concretó en cuánto. «Invito a los vecinos a analizar lo que pagan en el recibo, hay un porcentaje pequeño que recibe el Ayuntamiento y una parte importante para la Junta«, argumentó en alusión al canon de depuración que se abona desde hace una década para financiar obras de saneamiento integral en la comunidad andaluza.

Por su parte, en los últimos meses, el Ayuntamiento nerjeño ha acometido varias obras de emergencia para solucionar inundaciones a raíz de la puesta en pruebas de la depuradora. Así, se han invertido 130.000 euros en acometer la construcción de un colector de 230 metros de longitud y 63 centímetros de diámetro de material PVC en la avenida del Mediterráneo, y unos 44.000 euros, para separar las redes de pluviales y fecales en la calle Frigiliana, cerca del Mirador del Bendito.

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El alcalde admite que hay quejas por malos olores y ruidos y pide al Gobierno central que los resuelva antes del traspaso

Los trabajos finales de la depuradora nerjeña han sido ejecutados por la empresa Lantania, que se quedó con la actuación tras la quiebra de la primera firma adjudicataria, Isolux-Corsán-Corviam, en el verano de 2017. La actuación inicial se adjudicó en 2013 por 23,24 millones de euros, a los que se sumaron dos millones de un proyecto complementario para incorporar ocho puntos de vertido no previstos inicialmente. La financiación ha corrido a cargo del Ministerio para la Transición Ecológica, al ser una obra declarada de interés general del Estado desde 1993.

La planta tiene capacidad para tratar 25.000 metros cúbicos de aguas residuales al día, lo que equivale a una población de hasta 125.000 habitantes -Nerja tiene apenas 21.000 empadronados-, con un sistema terciario para su reutilización en regadío. Es una instalación cerrada, por lo que se anunció que no emitiría olores ni ruidos, que cuenta con dos estaciones de bombeo principales, en la desembocadura del río Chíllar y en el paseo marítimo de Burriana. El emisario submarino para el vertido de las aguas depuradas se ha instalado en la playa de Burriana, a 800 metros de la costa.

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