La playa de Ferrara estrena espigón tras veinte años de regeneraciones de arena

eugenio cabezas

Durante más de dos décadas la playa torroxeña de Ferrara ha copado titulares con cada temporal fuerte de levante. Las olas engullían la arena hasta hacerla casi desaparecer, batiendo con fuerza contra el paseo. Hasta ahora, porque la zona cuenta ya con un espigón semisumergido, de 115 metros de longitud, situado en perpendicular al Faro, que pondrá fin a las pérdidas de arena y a una imagen que se había convertido en habitual, cada primavera, los camiones recorriendo la playa para regenerarla de cara al verano. El gasto en reposiciones ha sido, sin duda, muy superior a la inversión realizada en el nuevo espigón semisumergido: apenas 307.000 euros, que ya han comenzado a dar sus frutos.

Es cierto que este invierno la zona no ha soportado fuertes temporales de levante, pero desde que se culminó la actuación en el mar, con el vertido de las enormes rocas calizas, hace varias semanas, el entorno ha ganado más de una veintena de metros de anchura, ofreciendo una imagen histórica en la emblemática playa torroxeña, que es la que concentra una mayor oferta de hostelería en su paseo marítimo. Por este motivo, la satisfacción ayer en una visita a las obras del nuevo espigón era máxima, tanto del alcalde, Óscar Medina (PP), como de los empresarios locales.

«Era una demanda histórica del municipio de Torrox», resumió el regidor, acompañado por el delegado del Gobierno en Andalucía, Antonio Sanz; el subdelegado del Gobierno en Málaga, Miguel Briones; el presidente de la Diputación, Elías Bendodo, y el jefe provincial de la Demarcación de Costas, Ángel González.

La obra se ha ejecutado en un tiempo récord, pues los trabajos arrancaron a finales de febrero y finalizarán «en unos días», reduciéndose el plazo de ejecución de ocho a cuatro meses, «con lo que evitaremos molestias a los bañistas y mejoraremos la perspectiva de cara a próximas temporadas». «Ferrara ya ha ganado una media de entre 20 y 25 metros de playa natural gracias a la construcción del espigón», dijo Medina, quien señaló que la playa chica -situada a los pies del Faro- también ha duplicado su tamaño gracias al asentamiento de arena producido con la escollera.

Remodelación del paseo

Los trabajos ejecutados por la empresa almeriense Construcciones Tejera S. A. han contado con un presupuesto de 306.933 euros, financiados por el Ministerio de Medio Ambiente. El espigón mide 115 metros de largo por seis metros de ancho. Además, se ha remodelado la parte del paseo marítimo que conecta con la avenida del Faro, diseñándose tres tramos de rampa y modificando la escalinata sur del paseo, de modo que quedan unas mesetas intermedias que conectan con el sendero que va por el acantilado y con la urbanización colindante.

Además, en las zonas donde la fuerza del oleaje es mayor, se ha realizado un manto de protección con bloques de escollera de entre cinco y seis toneladas de peso, con un espesor de capa de tres metros. Costas ha destinado más de 207.000 euros en aportaciones de arena en las playas de Ferrara y El Morche. El Gobierno central ha invertido en la costa malagueña 15 millones entre 2012 y 2016.

Por último, Bendodo resaltó «las buenas previsiones turísticas de cara a la próxima temporada en la Costa del Sol». «Este año ha sido el primero en el que todas las playas se encuentran en perfectas condiciones al inicio de la temporada, gracias a las aportaciones de 197.000 metros cúbicos de arena en diez municipios, con una inversión de 1,5 millones por parte del Gobierno central», declaró.

Son los metros que mide de largo el nuevo espigón, situado en perpendicular al Faro de Torrox.

Es la inversión del Gobierno central este año en regenerar playas en diez municipios malagueños.