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Eugenio Cabezas
Sábado, 3 de enero 2015, 14:58
José Torres no podía casi articular ayer palabra. No era para menos. Después de una vida muy dura, 14 años trabajando como emigrante jornalero en Suiza y Francia, siempre en el campo, en la obra, «o en lo que salía», a sus 81 años, este jubilado de Canillas de Aceituno se ha convertido en nuevo millonario. El cupón de la ONCE que cada jueves compra al vendedor José Antonio Abolafio resultó premiado en el primer sorteo del año con la friolera de nueve millones de euros.
«Cuando he visto al otro vendedor que viene al pueblo los sábados le he pedido que me comprobase en la máquina si el Cuponazo tenía algún premio. Me ha mirado y me ha dicho que me sentara y que llamase a mis hijos», confesó ayer a SUR pocas horas después de recibir la mayor alegría de su vida, un premio con el que no sólo podrán vivir tranquilos sus dos hijos, María José, de 48 años, casada y con dos hijos, Antonio, de 23, y Gabriel, de 18, y José, soltero de 46, sino «todas nuestras generaciones de descendientes durante unos pocos de años», repetía la primogénita todavía sin acabar de creerse del todo el multimillonario premio de la ONCE.
«Ahora le va a salir más de un novia, tanto a mi cuñado como a mis hijos», aseguró entre risas Antonio, el yerno del agraciado, también en paro como su cuñado José. «Estamos en una nube, no nos lo creemos, parece una película, una broma con cámara oculta, que en cualquier momento van a venir a decirnos que es mentira», añadió. «Me tiemblan las piernas, no puedo ni comer», dijo José Torres, mientras almorzaba en el restaurante La Sociedad, en pleno centro de Canillas de Aceituno. «No dejo de acordarme de mi madre, que se murió de un infarto hace siete años, cuando tenía 69», aseguró María José Torres. A su casa del centro histórico no dejaron de llegar en toda la tarde familiares, amigos y vecinos para felicitarla.
9 cupones con 30.000 euros
«Mi hijo mayor lleva dos años estudiando en la Universidad de Málaga sin becas», se lamentó Antonio. El menor, Gabriel, estudia segundo de Bachillerato en el IES Alta Axarquía de Periana. Ayer por la tarde, tras almorzar con la familia en el restaurante, en el que curiosamente coincidieron con el cantante malagueño Pablo Alborán, se fueron con unos amigos. Su abuelo se acostó a media tarde «de los nervios que tiene», dijo su hija.
Este pequeño pueblo del interior de la Axarquía, en la falda de La Maroma, y de apenas 1.800 habitantes, se convirtió en un hervidero de curiosos, ávidos por conocer la identidad del millonario. Además del premio de 9 millones al cupón con el número 94.927 de la serie 84, otros nueve cupones con este mismo número recibieron 30.000 euros cada uno, por lo que la lluvia de euros en el pueblo ha alcanzado los 9.270.000 euros.
Antonio Pérez, su mujer Manuela Aranda, y sus hijos Jesús y Antonio, son uno de estos agraciados con un pellizco que «nos servirá para tapar agujeros y darnos algún capricho, pero nada que ver con la fortuna de José».
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