La Asociación Deportiva Almayate cuenta esta temporada con once equipos federados de fútbol, en los que hay 250 jugadores, desde los babys hasta los sénior. ... La afición por el deporte rey no ha parado de crecer de la mano de esta entidad, creada hace cuatro años en este núcleo del litoral occidental de Vélez-Málaga. Sin embargo, el gran hándicap con el que se encuentran los jugadores es el lamentable estado del campo de La Ermita.
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«Esto es peor que jugar en un patatal», se queja el vicepresidente de la entidad deportiva, Emilio Vida, quien ha perdido la cuenta de las veces que les han prometido desde el Ayuntamiento de la capital de la Axarquía que «en unos meses» se iniciarían los trabajos para sustituir el césped natural plantado hace más de una década por uno artificial, como el que cuentan la práctica totalidad de los recintos deportivos de la provincia.
«Nos dicen que es la burocracia, que el proyecto está en contratación, pero así llevamos ya varios años, el último plazo que nos han dado es que para junio empezarán las obras y que la próxima temporada ya tendremos el nuevo césped», asegura Vida. El pésimo estado del terreno de juego, «repleto de boquetes», hace que el balón no bote bien y que los equipos que vienen de fuera «se rían de nosotros y algunos han llegado a protestar al árbitro y a la federación», apostilla el directivo.
Sin embargo, por el momento, «y toquemos madera, no nos han cerrado la instalación, como le ha ocurrido a Torremolinos hace unos meses con el campo de fútbol de El Pozuelo«, tal y como publicó SUR el pasado noviembre. Eso sí, el pésimo estado del terreno de juego provoca que las lesiones sean constantes. »Hace poco tuvo una lesión un juvenil, y tuvo que venir el 061 a por él, con una luxación en la pelvis, y hace dos años, otro jugador se rompió la tibia y el peroné, y sin contar, todos los esguinces de rodillas y tobillos que se producen, tanto de jugadores locales como visitantes«, cuenta Vida.
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Si tienen que contentarse con algo y, al contrario de lo que sienten los axárquicos, la escasez de lluvias por la sequía extrema que vive la comarca oriental está haciendo que las condiciones del terreno de juego no empeoren. «Sabemos que hace muchísima falta que llueva y ojalá lo haga ya de una vez, pero de momento nos está beneficiando, porque aunque se levanta más la tierra, por lo menos no se forman charcos ni boquetes más profundos», sostiene el directivo de la entidad.
La instalación deportiva de Almayate data de 1990 y el césped natural se sembró por última vez hace más de una década. En estos años se ha intentado replantar por completo en varias ocasiones, pero sin éxito, debido al mal estado de la tierra. Únicamente se mantiene con riegos y algunos trabajos de alisado de la irregular superficie.
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Por su parte, el concejal de Deportes, Hipólito Gómez (PSOE), no pudo concretar a SUR cuándo comenzarán los trabajos de sustitución del césped natural por el artificial, valorados en unos 300.000 euros. «Eso depende de los técnicos, está en el Área de Contratación, no puedo comprometerme a una dar una fecha concreta, pero queremos que sea lo antes posible, pero los trámites burocráticos llevan su tiempo», argumenta el edil, quien defiende que desde su departamento están trabajando «intensamente» para mejorar y mantener «todas» las instalaciones deportivas municipales.
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