Nuria López, Yolanda Díaz y Carmen Castilla. EFE/ Raúl Caro
Análisis

Yolanda Díaz no llega a tiempo

La ministra de Trabajo reconoce que el proyecto que quiere construir para movilizar a todo el espectro a la izquierda del PSOE no estará listo para las elecciones andaluzas

Viernes, 4 de marzo 2022, 00:17

La carrera de Yolanda Díaz no tiene meta volante en Andalucía. El proyecto de la ministra de Trabajo para construir una fuerza que aglutine a todo el espacio político a la izquierda del PSOE se ha marcado plazos que van más allá de este año. ... No habrá una papeleta que lo represente en las elecciones autonómicas.

Publicidad

Díaz rebajó este jueves las expectativas que se habían levantado por su primera visita a Andalucía desde que se anunció que trabaja en un proyecto que pretende ir más allá del que ahora mismo representa Unidas Podemos. La ministra reconoció que el calendario de la iniciativa que encabeza lo marca la política nacional, por lo que no estará listo para cuando se convoquen las elecciones en Andalucía.

«¿Qué tiene que hacer entonces la izquierda andaluza?», le preguntaron ayer cuando realizaba una visita oficial al Centro Nacional de Medios de Protección, la primera que realiza un miembro del Gobierno a ese organismo, abierto en 1974. «Yo no soy nadie para decirle a nadie lo que tienen que hacer», respondió. Más allá de su alto cargo institucional, Díaz recordó que no pertenece a la dirección de ninguna fuerza política.

Aún así, la ministra aprovechó su visita de ayer a Sevilla para mantener reuniones con representantes de las fuerzas que, se supone, podrían integrarse en su proyecto. Lo hizo con dirigentes de las dos formaciones que conforman Unidas Podemos -Toni Valero y Ernesto Alba, de Izquierda Unida y Martina Velarde y Lilith Verstrynge, de Podemos-, con Esperanza Gómez, responsable andaluza de Andaluces Levantaos, la coalición que promueve Más País en Andalucía, y con dirigentes de Equo. Se habló de política andaluza.

Publicidad

Estos dirigentes estuvieron después entre el público que asistió a una mesa redonda con las secretarias generales de UGT y CCOO de Andalucía, Carmen Castilla y Nuria López, en la Facultad de Derecho de la Universidad de Sevilla. Como muestra del entusiasmo que levanta Díaz en el espacio de la izquierda hubo que habilitar una sala contigua al colmarse el aforo de 400 asientos. Quien no se dejó ver por el aula magna fue la líder anticapitalista de Adelante Andalucía, Teresa Rodríguez, que ya se ha descartado para cualquier operación de unidad.

La ministra, que fue recibida al grito de «presidenta» no ve que los tiempos den para montar un proyecto andaluz, pero sí quiere contar con Andalucía para poner en marcha su proyecto nacional. «No se puede construir un nuevo país sin Andalucía», reconoció antes de anunciar que en su proceso de escucha se la verá repetidamente por el sur.

Publicidad

¿Por qué no es posible que Díaz amadrine una posible coalición que acuda a las elecciones autonómicas? La propia ministra dio algunas pistas. La primera es que aspira que su proyecto no se limite a ser una sopa de siglas que salte por los aires ante el primer problema por no estar sustentado en un acuerdo de fondo que requiere tiempo. El fallido experimento de Adelante Andalucía, que aún escuece en la izquierda andaluza invita a la prudencia.

Pero también porque quiere evitar que el suyo sea visto como un proyecto nacido desde el centro del poder político e impuesto a la periferia de las comunidades autónomas. El auditorio que ayer se congregó para escuchar a Díaz y a las dirigentes de UGT y CCOO, donde había responsables políticos y sindicales y miembros de casi todas las fuerzas a la izquierda del PSOE y de organizaciones sociales, demostró no sólo el poder de convocatoria de la ministra, sino también su capacidad aglutinante entre diferentes sensibilidades de la izquierda. Pero de momento, si hay unidad, deberá hacerse a la intemperie, no bajo su paraguas.

Este contenido es exclusivo para suscriptores

Suscríbete durante los 3 primeros meses por 1 €

Publicidad