Susana Díaz: «Los valores del 28 de Febrero están más vivos que nunca»

¿Qué es para usted ser andaluz?

Ser andaluz es una manera de estar en el mundo, es una filosofía de vida basada en la tolerancia y en el esfuerzo. Somos un pueblo libre, sabio y trabajador, de gente que integramos a todo el mundo y que sabemos integrarnos allá donde vayamos, que siempre hemos defendido la riqueza que supone la diversidad y que combinamos el orgullo de nuestra historia con nuestra capacidad de innovación y de superación.

¿Cuál cree que es y debe ser el papel de Andalucía en el contexto español?

Andalucía siempre ha sido y será la garantía de la igualdad en nuestro país. Los socialistas andaluces lo llevamos en nuestro ADN y siempre hemos defendido que no queremos ser más que nadie, pero que no consentiremos ser menos. Y ahora, en este contexto de crisis sanitaria, económica y social que ha provocado la pandemia del coronavirus, los valores del 28F están más vivos que nunca; debemos estar a la altura y cooperar al máximo entre todos. No es el momento de la confrontación, de forzar conflictos y dividir a la sociedad por rascar un puñado de votos. La gente lo está pasando muy mal y eso exige que demos lo mejor de nosotros mismos.

¿Cree que Andalucía tiene el suficiente nivel de autogobierno?

Precisamente, este año se cumplen 40 años de nuestro Estatuto de Autonomía, una norma que representa el anhelo de igualdad y libertad de un pueblo que supo pelear unido, de manera cívica y democrática, por sus derechos. El 28 de Febrero es el gran patrimonio democrático que tenemos los andaluces y andaluzas, y durante estas cuatro décadas ha permitido la mayor revolución social y económica que ha experimentado nuestra comunidad en su historia reciente. No es una cuestión de más o menos competencias, es una cuestión de ejercerlas. Lamentablemente, durante estos dos últimos años hemos visto una Junta de Andalucía que hace dejación de sus funciones, o bien para que el Gobierno de España venga a solucionarles los problemas o bien para confrontar estérilmente y montar polémicas.

¿Qué le falta a Andalucía y a los andaluces?

A Andalucía ahora mismo le falta un Gobierno progresista que esté cerca de la realidad y que mire por la gente que lo está pasando mal, por los sanitarios que están exhaustos, por los comerciantes y hosteleros que tienen miedo a tener que echar la persiana, por los desempleados que ha provocado esta pandemia. Dos años han sido más que suficientes para que la gente vea el daño que este gobierno de derechas está haciendo a nuestra sanidad, a nuestra educación y a nuestros servicios sociales, por no hablar de las concesiones a la ultraderecha, empezando por los ataques y recortes en violencia de género, igualdad, memoria democrática o educación en libertad, y terminando por el cuestionamiento de nuestra propia autonomía y autogobierno, incluso con insultos al padre de nuestra patria, Blas Infante.

¿Cuál es la principal virtud de Andalucía y de los andaluces?

El talento y el talante, la capacidad que tenemos los andaluces y las andaluzas de trabajar muy duro, con un tesón inquebrantable, por lo que queremos, pero ser a la vez capaces de hacerlo siempre con generosidad, con altura de miras y pensando en los demás, con un buen gesto y una buena palabra.

¿Cómo ve el futuro de Andalucía?

Veo a nuestra tierra volviendo a la senda del progreso, de la ilusión y del futuro. Sacudiéndose el sufrimiento que está provocando la pandemia y el tedio de un gobierno andaluz indolente. Hay futuro más allá del Covid. Un futuro de transformación digital, de economía verde, de recuperación de nuestra sanidad y nuestra educación y de modernidad: un futuro de progreso por el que trabajamos sin descanso los y las socialistas.

Díganos una obra o un personaje de referencia de la cultura y el pensamiento en Andalucía y por qué.

Quedarse con un andaluz o andaluza siendo ésta una tierra de tantísimos hijos e hijas ilustres es complicado. Pero creo que ahora, más que nunca, es el momento de reivindicar la figura de Blas Infante, de nuestro padre de la patria andaluza. Desgraciadamente, en el Parlamento estamos viendo día tras día a una ultraderecha retrógrada que pone en cuestión nuestra historia, nuestra autonomía e, incluso, la lucha de miles de hombres y mujeres que dieron su vida por nuestra tierra. Sin Blas Infante, sin su pensamiento y sin su ejemplo, la Andalucía de la que disfrutamos hoy sería otra bien distinta.

Creo que también es de justicia reivindicar siempre a nuestras mujeres ilustres, que sumaron a su esfuerzo la lucha por la igualdad. Ya que estamos en un diario me gustaría destacar a la periodista almeriense Carmen de Burgos, que tanto hizo desde sus columnas por el buen periodismo y por los derechos de las mujeres.

Díganos un referente o emblema cultural, musical, gastronómico, monumental o natural de Andalucía...

Andalucía es una tierra enorme, rica y diversa. Es la tierra de Federico García Lorca, los hermanos Machado, Alberti, María Zambrano o Juan Ramón Jiménez; de Camarón, Lola Flores, Paco de Lucía, Alejandro Sanz o Medina Azahara; del aceite de oliva virgen extra, los espetos o el jamón ibérico de bellota; de Doñana, las Alpujarras o el Cabo de Gata; de la mezquita de Córdoba, la Giralda o la Alhambra. Una tierra que nunca te cansas de descubrir y que siempre te sigue sorprendiendo.

Un lugar en Andalucía que recomendaría a un amigo.

Innumerables, depende de a quién y para qué. Siempre hay un rincón de Andalucía para cada momento, para cada sentimiento, dispuesto a atraparte. Desde las marismas de Huelva, a la internacionalmente conocida costa de Málaga; desde el vastísimo patrimonio monumental de Sevilla o de Córdoba, a la naturaleza salvaje y el milagro económico de Almería; desde el mar de olivos del paraíso interior de Jaén, hasta la riqueza cultural, turística y deportiva que atesoran Granada o Cádiz. Pero, si me permite la licencia, un amigo o una amiga son personas de confianza que hay que llevarlos a tu casa, y yo en este caso haría patria chica: los citaría en Triana.