Satse pide a la Junta una apuesta decidida por la sanidad pública en 2023 «tras un año de luces y sombras»

En este sentido, según se indica en nota de prensa, el Sindicato de Enfermería considera «clave» el año que se inicia al ser el primero del Gobierno andaluz en mayoría absoluta, sin trabas por tanto para afrontar las mejoras que requiere la sanidad pública andaluza, y la coincidencia con la próxima celebración de elecciones generales, que obligarán a todas las fuerzas políticas a posicionarse y a las que Satse exigirá realidades más que compromisos vacíos.

Para Satse el balance general del año 2022 en Andalucía revela que «no se han cumplido» los principales compromisos realizados por las diferentes administraciones públicas en lo peor de la pandemia del Covid-19.

Durante la pandemia la agenda pública estaba centrada en la sanidad y sus profesionales, un sistema que ha mostrado sus debilidades y que requiere de reformas urgentes y de gran calado para garantizar la atención sanitaria y cuidados y sobre el que todas las fuerzas políticas han mostrado sus compromisos de mejora, unos compromisos que durante el 2022 «no se han afrontado en profundidad y que deja una sanidad pública que sigue presentando grandes déficits».

En este sentido, como aspectos negativos Satse destaca que la infrafinanciación de la sanidad andaluza, con un presupuesto prorrogado durante todo el año 2022, han generado que «sigan creciendo las listas de espera para consultas, pruebas diagnósticas o intervenciones quirúrgicas en los hospitales, al igual que el tiempo para ser atendido en un centro de atención primaria».

De igual forma, se ha mantenido la «inestabilidad» de la plantilla, con un 20% de la misma en las categorías de enfermeras, enfermeras especialistas o fisioterapeutas «renovando cada seis meses con los denominados contratos de refuerzo Covid, a pesar de haberse revelado como imprescindibles para el funcionamiento de los centros sanitarios», siendo necesario su estabilización en el año que se inicia

Satse apunta, además, que las plantillas estructurales de enfermeras, enfermeros y fisioterapeutas «siguen muy alejadas» de su equiparación con la media nacional y europea, como garantía imprescindible para la seguridad del paciente.

En este sentido, Satse lamenta también que «haya pasado un año en blanco» sin que se haya aprobado en el Congreso la Ley de Seguridad del Paciente, que la organización sindical registró en el Congreso de los Diputados como iniciativa legislativa popular, y que a día de hoy casi tres años después de su entrada sigue atascada con más de 70 prórrogas por la presentación de las enmiendas parciales.

En cualquier caso, destacando aspectos positivos en Andalucía, Satse destaca el acuerdo suscrito en abril que mejoraba las condiciones laborales y retributivas en especial de las enfermeras, enfermeras especialistas y fisioterapeutas, situándolos entre que los profesionales mejores pagados del Sistema Nacional de Salud en estas categorías, además de implementar cambios en el modelo de Carrera Profesional sobre los que aún se está trabajando. Este acuerdo supuso un buen punto de partida para seguir negociando mejoras en materia de plantillas y condiciones laborales durante 2023.

De otro lado, en 2022 destaca Satse la consolidación de nuevo roles para la enfermería en la Sanidad andaluza, con el mantenimiento de las enfermeras referentes escolares o el desarrollo de las consultas de acogida en atención primaria que, cuyo funcionamiento «valoramos en general positivamente con datos que avalan su capacidad para resolver los casos de forma directa, si bien quedan aspectos por mejorar como son el consolidar la plantilla y homogeneizar el procedimiento de actuación en todos los centros de salud y que requerirían de una negociación con los representantes de los trabajadores».

Por último, Satse destaca que, por primera vez en Andalucía, sea una enfermera quien ostente el cargo de mayor responsabilidad en la sanidad andaluza desde el nombramiento de Catalina García como Consejera de Salud y Familias de la Junta de Andalucía o la también enfermera Carmen Bustamante como directora general de Personal del Servicio Andaluz de Salud.

A juicio de Satse estos nombramientos deben servir para impulsar un mayor liderazgo de las enfermeras dentro de los distintos ámbitos de responsabilidad administrativa y política de la comunidad andaluza. Asimismo, podrá contribuir de manera decisiva en la mejora de la salud, bienestar y calidad de vida de los andaluces desde una visión integral e integradora que aportan las enfermeras.

Desde el Sindicato de Enfermería concluyen asegurando que trabajarán con todas las herramientas sindicales que estén en su mano para defender la Sanidad Pública y sus profesionales en Andalucía y con el objetivo de lograr un sistema sanitario que cuente, en todo momento, con los medios y recursos suficientes para que los pacientes y el conjunto de la ciudadanía sean atendidos y cuidados «de manera excelente, sin esperas, sin recortes y sin problemas añadidos».