Puertos andaluces, de la competencia a la colaboración
Sistema portuario ·
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La cooperación del sistema interportuario y la conexión con el ferrocarril son los principales desafíos en un escenario de creciente competencia globalAndalucía tiene uno de los sistemas portuarios más extensos de Europa, y a pesar de ello no le extrae todo su potencial de negocio. Hasta ahora Puertos del Estado ha fomentado la competencia fraticida entre ellos, lo que ha dado lugar a «taifas» en las ... que cada autoridad portuaria se ha acostumbrado a hacer la guerra por su cuenta. La colaboración que prima en las relaciones logísticas de las grandes radas del norte de Europa, en Holanda y Alemania, no se ha visto nunca por estas latitudes, lo que, junto a otros factores, ha sido aprovechado por la competencia, especialmente de Marruecos, para tomar más fuerza en el Estrecho.
Recientemente hubo tímidos intentos de aproximación, con la unión para concurrir al concurso de la terminal ferroviaria de Córdoba, y aunque no fructificó este puede ser el embrión de un cambio de mentalidad que no es fácil tras décadas de distanciamiento, que el nuevo Gobierno de la Junta está empeñado en recomponer. Junto a ello, los expertos en logística portuaria apuntan otras claves de lo que debería ser un buen sistema portuario andaluz: la especialización, la extensión del uso del ferrocarril y ser complementarios en cuanto a los usos.
Desde el punto de vista logístico, el gran puerto de la comunidad, y uno de los más importantes de España, es Algeciras. Allí se produce el grueso de los movimientos de contenedores, en dura competencia con las dos terminales de Tánger Med; y también destaca por el tránsito de productos petrolíferos. Los muelles algecireños movieron el año pasado más de 5,1 millones de Teus (estándar de medida de los contenedores), lo que supone un crecimiento del 7,3%, según el balance del presidente de la Autoridad Portuaria de Algeciras, Gerardo Landaluce.
De estos, destaca el crecimiento de la actividad de importación y exportación, de hasta el 14%. El enlace marítimo del Estrecho para mercancías mantuvo su ritmo creciente, con 367.814 camiones (un 8,6% más), de los que 326.529 lo hicieron en la línea Algeciras-Tánger Med. El pasaje también sigue al alza en las tres líneas del Estrecho (desde esta instalación a Ceuta y Tánger Med; y desde Tarifa a Tánger Ciudad) y ha superado por primera vez los seis millones de personas, con 1.223.503 coches.
Con ello, el año pasado alcanzó la cifra récord de 109,4 millones de toneladas de actividad, lo que supone que está entre las cinco primeras radas de Europa. La actividad ferroviaria sigue al alza, con 541 trenes de mercancías operados, un 16% más, con 15.624 Teus (87% de incremento). En cambio, Gerardo Landaluce denunció que los trabajos para la mejora de la conexión ferroviaria Algeciras-Bobadilla marchan «a un ritmo tremendamente lento y con plazos preocupantes». Puso como ejemplo que los dos apartaderos que debe ejecutar Adif entre Algeciras y Bobadilla cuentan con financiación desde 2017 y aún no están en proceso de licitación. Estas estructuras, de 750 metros de largo, son fundamentales dado que no se va a desdoblar toda la vía, aunque no podrán estar disponibles hasta dentro de tres años.
En lo que respecta a Málaga, su punto fuerte son los cruceros, y también despunta en el tráfico de graneles agroalimentarios y de cemento de la fábrica de La Araña. En el mercado de contenedores ya funciona de facto como un complemento de Algeciras, según comentó Carlos Rubio, presidente de la Autoridad Portuaria de la capital. También se está haciendo una apuesta por las conexiones con el norte de África, tanto para pasajeros como para mercancías, con la próxima puesta en marcha de una conexión directa con Nador (además de la histórica línea con Melilla, actualmente operada por partida doble por Trasmediterránea y Baleària). Junto a la faceta netamente industrial, el de Málaga es una referencia nacional en la integración urbana. En este sentido, a los muelles uno y dos se le sumarán en breve la dársena para megayates; y a más largo plazo, la torre para un hotel de lujo en el dique de Levante; una nueva noria, un puerto deportivo en San Andrés y edificios para oficinas en Muelle de Heredia, entre otros.
Cádiz tiene una actividad similar en lo que respecta a los principales campos de trabajo del anterior, sobre todo en el ámbito de los cruceros. También destacan ambos por los graneles agroalimentarios. Huelva tiene una fuerte especialización en productos químicos, graneles y pesca. Motril se ha centrado en la conexión con el norte de África, donde tiene un papel relevante porque está más cerca geográficamente; y en los productos hortofrutícolas. Y Almería es el puerto de salida de la gran industria de la piedra de Cosentino y Macael; y también tiene una posición en la relación con África, además de su potente 'Hinterland' agroalimentario.
Por su parte, el puerto de Sevilla está en el centro de una de las zonas económicas y de población más importantes de Andalucía, lo que permite el acceso de mercancías hasta el corazón mismo de la comunidad, aunque con buques de bajo calado. Además, tiene unas enormes posibilidades de desarrollo en los proyectos de integración Puerto-ciudad, porque toda la ribera del Guadalquivir que atraviesa el Centro es dominio público portuario.
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