El PSOE enfría las prisas del Gobierno andaluz para aprobar cuanto antes la ley del suelo

Aunque se han acordado negociaciones tanto en reuniones políticas como técnicas, el Partido Popular no ha conseguido el objetivo de máximos que se había propuesto: que el debate para dar al texto su aprobación inicial fuera en la próxima sesión plenaria, que tendrá lugar la semana que viene y en la que el presidente de la Junta comparecerá en un debate sobre el estado de la comunidad.

Ayer, miércoles, se aprobó el orden del día del pleno y los grupos que sustentan al Gobierno andaluz pidieron un acuerdo para que el punto fuera incluido. El plazo para la presentación de enmiendas a la totalidad aún no ha terminado, por lo que el debate sobre el texto sólo podía incorporarse si lo admitían todos los grupos. Al tratarse de una situación anómala, ya que debían alterarse los plazos reglamentarios, se necesitaba el consenso de todos los grupos. El PSOE, que se ha mostrado dispuesto a llegar a un acuerdo sobre el texto, y Unidas Podemos, que ya ha anunciado una enmienda a la totalidad, se opusieron. El debate sobre el texto deberá esperar al menos dos semanas más.

Para el portavoz del PP, José Antonio Nieto, la postura socialista arroja un manto de dudas sobre la verdadera voluntad de acuerdo sobre asuntos sustanciales formulada por el candidato socialista, Juan Espadas, ya que esa negativa a incluirlo en el orden del día supone bloquear la norma. «No ha sido posible que Podemos y el PSOE se impliquen en la ley», lamentó. El portavoz aseguró que su formación «quiere creer» que la oferta de Espadas es sincera, pero de momento no ha pasado más allá de las palabras.

Por su parte, el portavoz adjunto de Ciudadanos, Fran Carrillo, apeló a la responsabilidad de todos los grupos para sacar adelante una norma a su juicio fundamental para el futuro de Andalucía.

La portavoz adjunta socialista, María Márquez, justificó la posición de su grupo en que incluir el punto en el orden del día hubiese supuesto una violación del reglamento. El PSOE, dijo, está dispuesto a acordar, pero no a saltarse las normas.

Recordó en ese sentido que el grupo socialista sí ha aceptado que el proyecto de ley tramite por la vía de urgencia, lo que acortará los plazos parlamentarios una vez que el texto comience su tramitación. «Parece que son ellos los que no quieren sentarse a la mesa con nosotros», dijo la parlamentaria socialista, que se mostró sorprendida por las acusaciones de bloqueo. «Sobre las prisas que tienen tendrá que responder el Gobierno», dijo Márquez, que se preguntó si al PP le interesa «una vía más rápida con Vox» o sentarse a trabajar con el PSOE para llegar a un texto de consenso.

Más allá de este desacuerdo sobre los plazos, la negociación para sacar adelante la ley apunta en la dirección de un acuerdo. Tanto Nieto como Márquez explicaron que ya hay programadas reuniones políticas y técnicas del PP y la Consejería de Fomento con el PSOE.

También ha habido contactos entre el Partido Popular y Vox, formación cuya abstención permitió que hace un mes prosperara la enmienda a la totalidad presentada por Adelante Andalucía. En esta ocasión, las negociaciones han permitido acercar posturas en «muchos artículos» que no convencían al partido de Abascal, cuyo portavoz, Manuel Gavira, volvió a criticar ayer el acercamiento entre el PP y el PSOE.

La ley incide en dos aspectos: por un lado la agilización y simplificación de los trámites urbanísticos, en especial los referidos a la planificación y los planes de ordenación, y por el otro el tratamiento de los suelos. Sobre el primero parece haber un acuerdo total, pero en relación con el segundo, pese a no haber diferencias en lo referido a los suelos urbanos y urbanizables sí las hay en cuanto al suelo rústico.

Márquez subrayó que una de las 'líneas rojas' que se ha marcado su grupo es la protección del litoral andaluz, y en ese sentido ha presentado una proposición no de ley para garantizar la preservación de los valores naturales del litoral andaluz.

Quienes ya se han desmarcado del posible acuerdo son los diputados no adscritos expulsados de Adelante Andalucía. Para el parlamentario Ignacio García, «resulta sorprendente que la primera acción del nuevo PSOE de Juan Espadas sea pactar con el PP esta ley», que en su opinión supone un regreso a la «cultura del pelotazo».