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Susana Díaz, el pasado sábado, tras asistir a la primera parte de la sesión de investidura de Pedro Sánchez. EFE
Los partidos del nuevo Gobierno de España discrepan en Andalucía sobre su coalición y aliados

Los partidos del nuevo Gobierno de España discrepan en Andalucía sobre su coalición y aliados

La posición de Teresa Rodríguez (Podemos) contraria al pacto no solo difiere de la de Susana Díaz (PSOE-A), sino también de la de su aliado en Adelante Andalucía, Toni Valero (IU)

Martes, 7 de enero 2020, 00:33

La satisfacción y hasta euforia en el PSOE y Unidas Podemos por formar el primer Gobierno de coalición en España, tras salir hoy investido Pedro Sánchez presidente salvo sorpresas, no encuentra la misma correspondencia en Andalucía de los partidos protagonistas: socialistas, Podemos e Izquierda Unida. Las diferencias no están solo entre PSOE y Adelante Andalucía, sino entre los partidos que integran esta última plataforma, registrada como partido en víspera del 10-N. La posición de Teresa Rodríguez en contra del acuerdo que llevará a su partido al Gobierno de España por primera vez en la democracia genera controversia en el grupo parlamentario de Adelante Andalucía, dado el apoyo explícito al mismo del líder regional de IU, Toni Valero. Tampoco tendrá fácil Susana Díaz defender, como ha hecho la federación socialista que lidera, que la permanencia en la Moncloa de su partido se deba a la abstención de los independentistas de ERC, en contra de sus opiniones hace menos de un año. Como fondo, los respectivos liderazgos de Podemos y PSOE en Andalucía en un año en el que toca abrir el melón de las primarias. En las formas, ha llamado la atención el silencio o malabarismos en las declaraciones de las federaciones andaluzas ante un acontecimiento histórico en que sus respectivos partidos son protagonistas.

PSOE

Susana Díaz ha mantenido hasta el último momento su petición a PP y Cs para que se abstengan en la investidura de Pedro Sánchez y que este no deba la misma a los independentistas catalanes de ERC. Díaz, que fue una de los 'barones' socialistas que presenció en el Congreso el discurso de investidura de Pedro Sánchez este pasado sábado, ha echado mano de filigranas dialécticas para no entrar en contradicción con su conocida postura política en contra de acuerdos de su partido con los independentistas catalanes y de concesiones a estos. Ha enfatizado su defensa de Sánchez como garante del cumplimiento de la Constitución, pero ha eludido referirse al pacto del PSOE con ERC. Para esto envió a otros dirigentes a dar la versión oficial del socialismo andaluz, como Micaela Navarro (presidenta del PSOE-A) y José Fiscal (portavoz en el Parlamento). Ambos han transmitido la confianza «absoluta» en Sánchez de que el acuerdo no supondrá «ningún menoscabo» para la autonomía andaluza y también en que el Gobierno PSOE-Unidas Podemos no se saldrá de los márgenes de la Constitución en la negociación con la Generalitat.

Díaz se muestra más tibia que otros 'barones' regionales, que no han ocultado su preocupación por la mochila con la que arrancará Pedro Sánchez su segunda etapa en la Moncloa de la mano de Unidas Podemos y ERC. Responde de alguna forma a la tradición socialista de hacer piña cuando se preside la Moncloa; Pero también a la propia coyuntura personal de Díaz, que hizo las paces con Sánchez después de perder la Junta en enero de 2019 y porfía en volver a ser candidata a dirigir el PSOE-A y a la Presidencia de la Junta. Para ello tendrá que enfrentarse a unas primarias, cuyo proceso se abrirá posiblemente este verano, cuando Díaz ya esté de vuelta de la baja maternal de su hija, cuyo nacimiento se prevé en febrero.

El núcleo duro de la expresidenta ya está calentando motores con vista a ese proceso y ante los movimientos internos en su propio partido en torno a una candidatura alternativa. El portavoz parlamentario, José Fiscal, advertía en una entrevista de Efe publicada ayer de que no hay otra persona en el PSOE aparte de Díaz que ofrezca «garantías» de recuperar la Junta. «Susana Díaz es la persona con más posibilidades, prácticamente la única, de volver a presidir la Junta. Eso lo sabe todo el mundo», afirma. En el entorno de Díaz se espera el apoyo de Sánchez o al menos la imparcialidad de este si surgen otras candidaturas.

Podemos

Teresa Rodríguez siempre ha dicho que no volverá a ser candidata a la Presidencia de la Junta, pero sopesa volver a presentarse para seguir al frente de Podemos Andalucía. Una conferencia política de su partido abordará este mes el rumbo del mismo y su proyecto de autonomía respecto al modelo centralista de Podemos. Pero no solo se trata de esta vieja pugna de Rodríguez con el núcleo de Pablo Iglesias; sino las consecuencias que para el grupo parlamentario de Adelante Andalucía tendrá su oposición a la entrada de Unidas Podemos en el Gobierno de Pedro Sánchez, contraria a la de IU, y que la gaditana no oculta en redes sociales.

El mismo sábado del debate de investidura dejó claro que su voz «minoritaria» sigue estando en contra de una coalición con los socialistas. «Sería una falta de respeto cambiar de opinión solo porque es la de la mayoría a pesar de que estoy profundamente convencida de que el PSOE nos va a reventar a contradicciones», asegura en un coloquio con otra persona en su cuenta de Twitter. Distante de IU por pactar con el PSOE y de Susana Díaz sobre ERC, al exhibir del debate su admiración por los de ERC, de cuyo portavoz, Gabriel Rufián, destacaba el grito independentista de «¡Viva Andalucía libre!» con el que terminó su intervención.

Izquierda Unida

La posición de Rodríguez es secundada por los diputados de Podemos en Adelante Andalucía, cuyo silencio orgánico y en redes sobre la investidura pese a la tensión vivida ha sido clamoroso pues siempre suele pronunciarse sobre casi todo. Desde Izquierda Unida se admite que este silencio se debe a la posición de los anticapitalistas de Podemos, en alusión directa a Teresa Rodríguez y los suyos. IU ha huido de broncas internas aunque el malestar en el seno del grupo parlamentario se admite. Una paciencia en cierto modo debida a la expectativa de esta formación de que Alberto Garzón sea ministro, como ya desde Podemos se ha confirmado.

Para IU Andalucía se trata de un gran triunfo que el político malagueño esté en el Consejo de Ministros y su posición a partir de ahora va a cambiar. Presionará a los anticapitalistas para articular desde Adelante Andalucía una estrategia para que en la mesa del nuevo gobierno esté presente la agenda andaluza. Podemos, con Pablo Iglesias como vicepresidente, articulará las políticas sociales del bipartito de izquierdas. Para IU es importante aprovechar «todo lo positivo de la gestión del Gobierno central en la construcción de una alternativa de gobierno para Andalucía» y contraponer sus medidas «a la gestión neoliberal de Moreno Bonilla», según fuentes de la formación izquierdista. Para ello, los de Toni Valero confían en que Rodríguez «module su rechazo inicial» y se avenga a defender y hacer visibles las políticas del Gobierno Sánchez-Iglesias en Andalucía.

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