El Parlamento focaliza el 8M en la lucha contra la violencia machista

Este partido había desistido de defender otra iniciativa en contra de las manifestaciones feministas de hoy por el nulo respaldo que iba recibir. Vox incluso quedó fuera de las preguntas al presidente, Juanma Moreno, quien lanzó una propuesta a los grupos de un pacto de todos contra la lacra de la violencia machista. También el vicepresidente, Juan Marín, anunció más dinero para las unidades de violencia de género cuestionadas por los de Vox.

Con el aislamiento del partido ultraconservador a las puertas del 8M y en una precampaña electoral cara a las generales del 28 de abril, PP y Cs marcaban distancias en materia de igualdad con el partido que ha hecho posible el cambio en Andalucía. Cs siempre le puso reparos a Vox, pero ayer el PP de Juanma Moreno no quiso ir a medias tintas como la dirección nacional de su partido y se expresó con claridad y contundencia en defensa de las movilizaciones del 8M. Aunque su partido no defiende la huelga y tampoco las concentraciones, el presidente sí manifestó su respeto a quienes la hagan y no se le oyó ningún reproche en este sentido. Todo lo contrario, remarcó en sus respuestas, tanto con la portavoz de Adelante Andalucía, Ángela Aguilera, como con Susana Díaz, lo mucho que queda por hacer contra las desigualdades como la brecha salarial o la violencia machista. Pidió aprovechar el 8M «para hacer pedagogía de la buena, en la que se pueda construir una Andalucía mucho más inclusiva».

En este sentido, reeditó su propuesta de un pacto contra la violencia de género que ya lanzó cuando estaba en la oposición a Susana Díaz. Lo que sugiere el presidente es crear una mesa técnica de diálogo en el Parlamento y en las provincias en las que los partidos, o personas expertas que propongan estos, conversen sobre la base de la actual legislación y las medidas que se llevan a cabo en la administración para ver qué falla y qué se puede hacer para mejorarlo.

Moreno es consciente de que en periodo preelectoral este acuerdo es inviable, pero está dispuesto a esperar para sentar en la misma mesa a Vox con Adelante y PSOE convencido de que no puede dejar que la bandera de la igualdad sea solo patrimonio de unos frente a otros. «Me gustaría pensar que compartimos el mismo objetivo, evitar la desigualdad entre hombres y mujeres». «¿Por qué no puede ser este un punto de encuentro en la lucha contra la desigualdad?», inquirió el presidente de la Junta. «Se puede pensar diferente, pero si existen los mismos objetivos, se puede sumar», añadió.

Ángela Aguilera, que hizo de portavoz de Adelante en la interpelación al presidente, le espetó a este que se iba «a tener que fajar bien para hacer esas políticas de igualdad». Aludió a los escaños «del sidecar de la derecha, que viene a colocar a las mujeres en su sitio, en la casa con la pata quebrada», dijo en alusión a Vox, cuyos diputados estaban entonces fuera de la Cámara. Aguilera recordó al presidente que tendrá que ser con Vox con quien apruebe las partidas presupuestarias de igualdad.

El discurso feminista de Moreno desmontó la estrategia de Susana Díaz de afearle una vez más que respondiera de forma «timorata» a la petición de Vox de los nombres de trabajadores de las unidades en violencia de género de la Junta. En realidad esta pregunta fue rechazada por PP y Cs en la Mesa del Parlamento, gracias a lo cual no prosperó. Díaz intercaló sus reproches con una defensa de la igualdad como el ADN de su partido y animó a la participación en las concentraciones y manifestaciones de hoy para que los miles de hombres y mujeres que saldrán a la calle «sientan el respaldo de quienes creemos firmemente que sólo una Andalucía más igualitaria y una sociedad más justa, con más respeto a la coeducación y a la igualdad será una mejor sociedad para todos y todas».

A Díaz también le respondió de alguna manera Juan Marín en un debate en la mañana con la diputada y exconsejera de Educación Sonia Gaya, a quien anunció que pondrá en marcha un plan de choque para reforzar las unidades de valoración integral de violencia de género con 700.000 euros, aumentar la partida para el turno de oficio, unificar los criterios de los equipos psicosociales y reforzar los puntos de encuentro familiar. «No vamos a dar ni un paso atrás», enfatizó. Su consejera de Igualdad, Rocío Ruiz, también puso énfasis en asegurar que su departamento desarrollará la ley de medidas de prevención y protección integral contra la violencia de género aprobada en julio pasado hasta el punto de revisar protocolos entre administraciones que llevan diez años sin hacerse.