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En plena efervescencia de un debate fiscal que está marcando la agenda pública nacional, el Parlamento de Andalucía ha convalidado este miércoles el decreto-ley aprobado por el Gobierno andaluz la semana pasada. Lo hizo por una amplia mayoría de 69 votos a favor y ... 36 en contra. Vox sumó sus votos a los del Partido Popular, que cuenta con mayoría absoluta, mientras que toda la izquierda se pronunció en contra. La medida supone la bonificación al 100 por cien el Impuesto de Patrimonio, la deflactación del tramo autonómico del Impuesto sobre la Renta y la suspensión para el año próximo del canon del agua.
El anuncio la semana pasada de estas medidas por el presidente de la Junta, Juanma Moreno, desató un debate sobre la cuestión tributaria que ha marcado desde entonces la agenda política nacional. A partir de ese momento, otras comunidades autónomas anunciaron reformas fiscales y el Gobierno adelantó que pondría en marcha un nuevo tributo a la riqueza que supondría en la práctica la anulación de los efectos de la supresión del Impuesto de Patrimonio. La ministra de Hacienda, María Jesús Montero, puso este miércoles más temperatura al debate al advertir a las comunidades que promueven rebajas fiscales que no es coherente que al mismo tiempo reclamen más recursos a la Administración central del Estado, un mensaje que pareció teledirigido a las dos comunidades que están encabezando el reclamo de un nuevo sistema de financiación: Andalucía y la Comunidad Valenciana.
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La ministra también señaló que atendiendo a la recepción de 140.000 millones del Plan de Recuperación, «resulta poco coherente que los titulares que se protagonizan desde España sean de bajadas fiscales», ha dicho Montero.
Este debate ha planeado este miércoles sobre el Parlamento de Andalucía, donde la consejera de Hacienda, Economía y Fondos Europeos, Carolina España, defendió la medida y la necesidad de su tramitación por la vía de urgencia para que entre en vigor este mismo año y pueda aplicarse con efectos retroactivos al 1 de enero de 2022. La consejera señaló que ante la actual inflación galopante cualquier gobierno comprometido con las rentas medias y bajas tiene que actuar y destacó que la deflactación del IRP beneficiará a las familias con rentas menores a los 35.200 euros, lo que ayudará a cuatro millones de andaluces. Insistió también en el argumento de que la supresión del Impuesto de Patrimonio, un tributo que, aseguró, «no existe en Europa», permitirá atraer a nuevos contribuyentes. «Recaudaremos más porque habrá más contribuyentes y más actividad», aseguró.
España recordó que el entonces presidente socialista José Luis Rodríguez Zapatero, cuando suprimió el Impuesto de Patrimonio, argumentó que suponía una medida que evitaba que se penalice el ahorro, y arremetió contra la intención del Gobierno socialista de anular los efectos de su reforma fiscal con la creación de un nuevo impuesto. «Si tumban nuestra autonomía fiscal, Andalucía dará la batalla», advirtió.
También el secretario general del PP, Antonio Repullo, advirtió contra las intenciones del Gobierno y aseguró que su formación no va a dejar que el Ejecutivo «pase sobre la Constitución». También recordó que el paquete fiscal venía en el programa electoral votado mayoritariamente por el electorado en las pasadas elecciones.
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