El Parlamento reforma su reglamento con gran tensión entre Adelante y Anticapitalistas

El Parlamento andaluz aprobó este miércoles su nuevo reglamento que se adapta al pacto contra el transfuguismo y que deja como no adscritos a los siete diputados que lidera Teresa Rodríguez, que protagonizaron un tenso debate con sus excompañeros de Adelante Andalucía.

La aprobación de este reglamento, que se ha tramitado por la vía de urgencia, salió adelante con el apoyo de PP, PSOE, Ciudadanos y Adelante Andalucía y con la abstención de Vox, concluyendo así un largo proceso que ha estado rodeado de la polémica desde su arranque por el rechazo y las críticas de los parlamentarios expulsados de la confluencia de izquierdas, que votaron en contra y que van a denunciar esta situación ante el Tribunal Constitucional al considerar que se vulnera el derecho de representación y se impide su capacidad legislativa.

La parlamentaria que lidera a los desalojados de Adelante, Teresa Rodríguez, tuvo duras palabras contra sus compañeros de la confluencia a los que acusó de «vender su alma al fascismo para expulsarnos» y criticó «la imagen lamentable que proyecta la izquierda y el desánimo para sus votantes al someterla a ese desgarro».

Teresa Rodríguez dijo que «no hay ningún drama, hasta aquí hemos llegado y ojalá que les vaya bonito« y subrayó que «en las próximas elecciones habrá en la comunidad tres papeletas de izquierdas, dos con el centro en Madrid y una en Andalucía«, en alusión a la formación que liderará en la futura cita electoral con los expulsados de Adelante.

Además, intervino otra de las diputadas expulsadas, Ángela Aguilera, que arremetió contra la Cámara autonómica por «secuestrar la soberanía popular para entregársela a cada uno a sus partidos políticos«, mientras que el también expulsado Nacho Molina censuró al Parlamento por »tener el honor de ser el primero en resolver el conflicto interno de un partido«.

La réplica a estas críticas por parte de Adelante Andalucía la asumió el parlamentario Ismael Sánchez, que reconoció que «es legítimo emprender un nuevo proyecto político, pero el transfuguismo es corrupción y este reglamento robustece la calidad democrática de la Cámara andaluza».

Asimismo, argumentó que «si no se defienden las posiciones de una organización, hay que romper el acta, ya que de lo contrario es secuestrar ese acta, entendiendo que es una propiedad individual en un sistema en el que no se vota a las personas sino a las fuerzas políticas«.

Por su parte, el portavoz adjunto del PSOE-A, Rodrigo Sánchez Haro, calificó el transfuguismo como «un claro fraude y una las patologías políticas que quebranta la democracia representativa» y agregó que «es imprescindible definir las situaciones en las que los parlamentarios son y no tránsfugas«, como así lo recoge el nuevo reglamento.

El diputado del PP-A Juan Bueno resaltó el respaldo jurídico y técnico del nuevo reglamento que salva el derecho individual del diputado y también evita el menoscabo de los derechos políticos del grupo al que pertenece.

El portavoz de Ciudadanos, Sergio Romero, consideró la reforma como un «gran paso para luchar contra la corrupción, porque el transfuguismo también es corrupción en las instituciones y con esta iniciativa se pone punto final a una práctica poco democrática que socava la credibilidad de nuestro sistema electoral».

Por último, la portavoz adjunta de Vox, Ángela Mulas, cuestionó el nuevo reglamento ya que «el planteamiento que se aplica es totalmente equivocado, ya que no existe una identificación entre partido político y grupo parlamentario«, planteando sus dudas sobre la legalidad y constitucionalidad de la reforma.

Con este nuevo reglamento, el Parlamento andaluz se convierte en la primera cámara autonómica que adapta su Reglamento al pacto contra el transfuguismo suscrito a nivel nacional el año pasado.