Secciones
Servicios
Destacamos
José Luis Piedra
Lunes, 29 de julio 2019
Moderación, diálogo y estabilidad en Andalucía frente a la incertidumbre del Gobierno estatal tras el fiasco de la investidura de Pedro Sánchez. Así sintetizaba la situación política el presidente de la Junta de Andalucía y líder del PP-A, Juanma Moreno, en su intervención ayer ... en el Comité Ejecutivo Autonómico de su formación celebrado en Roquetas de Mar, donde avanzó el impulso de más reformas a partir de septiembre destinadas especialmente a eliminar trabas burocráticas y simplificar trámites administrativos para fomentar la actividad económica y empresarial y facilitar nuevas inversiones y proyectos para la generación de empleo. Además, anunció que su gabinete seguirá la senda de la bajada de impuestos en la línea de una de sus primeras medidas estelares como fue la supresión del Impuesto de Sucesiones y Donaciones.
Moreno se afanó en subrayar los múltiples efectos positivos de su Gobierno y de la credibilidad y sensatez de la «vía andaluza frente al espectáculo lamentable y el mercadeo insoportable» que se ha vivido durante la investidura fallida de Pedro Sánchez, en la que «no se habló de proyecto político sino de asientos y nombres en el Consejo de Ministros», precisó. «Cuando se aspira a la presidencia de un gobierno es esencial trabajar y no estar sentado en La Moncloa esperando», en alusión a la actitud de Pedro Sánchez hasta el debate en el Congreso. «Antes de llegar a la investidura, por coherencia política e institucional, hay que sentarse hasta la saciedad en torno a una mesa para llegar a acuerdo», remarcó.
En este sentido, arremetió con dureza contra las posturas de PSOE y Unidas Podemos en las que faltaban los proyectos de futuro para España y los españoles y que lo único que primaba era «dónde me siento yo, qué cargo tengo o cómo se va a llevar mi ministerio», apostilló.
Moreno puso de contraste y ejemplo su ejecutivo con su gran capacidad de diálogo y consenso para «desatascar asuntos tan complejos como los órganos instrumentales, la renovación de la RTVA y el Consejo Audiovisual o la aprobación de los Presupuestos de 2019, poniendo de acuerdo a partidos tan dispares como VOX o Adelante Andalucía». Según el presidente andaluz, estos seis meses de Gobierno del cambio se han traducido en «crecimiento económico, estabilidad, credibilidad, bajada de impuestos y mejora de la calidad de vida de los andaluces».
También remarcó las «más de 300 medidas impulsadas por su Gobierno reformista que están haciendo más abierta y competitiva la economía andaluza y mejorando la vida de los andaluces con serenidad, equilibrio y rigor». Moreno incidió en la reclamación de un nuevo sistema de financiación autonómica más justo con Andalucía para disponer de los 4.000 millones de euros para los servicios básicos que necesita la región, y que se acordó casi por unanimidad en el Parlamento andaluz. En este sentido, censuró la «amnesia» que sufre la ministra de Hacienda en funciones, María Jesús Montero, que es incapaz de hablar de esos 4.000 millones que son justos y necesarios para Andalucía y que la condenan a una situación e infrafinanciación .También instó al Gobierno en funciones a devolver los 400 millones de euros que debe a Andalucía en materia de IVA, además de proponer acompañar esa mejora de las cuentas autonómicas con una mejor financiación local para asegurar la solvencia económica de ayuntamientos y diputaciones.
Moreno recordó que otro de los objetivos de su ejecutivo, junto con la creación de empleo, es «salvar los servicios públicos que los socialistas han dejado tiritando». «Han tenido que venir los malvados del Gobierno del cambio a meter 760 millones en Sanidad, 250 en Educación y casi 90 millones en servicios sociales –en alusión a los nuevos presupuestos para este año- y por eso ahora nadie más del PSOE nos puede volver a dar una sola lección de política social», sentenció.
El jefe del ejecutivo autonómico aseveró que «en solo seis meses se ha demostrado que somos el gobierno de centro-reformista que necesitaba Andalucía y que la vía andaluza es creíble, viable y sensata, que busca puntos de encuentro y no la bronca permanente», en referencia a la oposición socialista.
Uno de los acuerdos alcanzados por el Consejo Ejecutivo Autonómico ha sido designar al viceconsejero de Presidencia, Antonio Sanz, como cargo de enlace entre el partido y el Gobierno. Así, el también presidente de honor del PP de Cádiz será a partir de ahora el coordinador de relaciones institucionales entre el ejecutivo y la formación con el objetivo de reforzar el diálogo entre ambos como correa de transmisión de las inquietudes de sus miembros y ciudadanía. Con el nombramiento de Antonio Sanz como bisagra entre partido y gobierno se pretende mejorar y reforzar aún más las relaciones e impulsar tanto el traslado de los aciertos y como también las cosas que hay que mejorar.
Los cambios en la ejecutiva del PSOE-A y el relevo en su portavocía del Parlamento andaluz acapararon gran parte del discurso de Juanma Moreno en su intervención ayer en el Comité Ejecutivo del PP-A. «Necesitamos un PSOE-A serio y coherente para dialogar y acordar», resaltó en su alocución al mismo tiempo que lamentaba la situación crítica que atraviesa la formación que lidera Susana Díaz. El presidente andaluz calificó de «reconversión urgente» la que está viviendo Susana Díaz después de ser testigo de excepción del fracaso rotundo de Pedro Sánchez en su fallida investidura.
Moreno lamentó la incertidumbre que rodea a esta formación ya que «no saben quién va a liderar su proyecto», además de mostrar su preocupación por esta situación y por «no ser capaces de encontrar su espacio como oposición». En este sentido, alertó de esa crisis de liderazgo en el PSOE-A que hace que esté «desaparecido no solo en España, sino también desgraciadamente en Andalucía» e insistió en la necesidad de contar con un partido en la oposición que sea capaz de acordar medidas y políticas que den respuesta a los grandes problemas de Andalucía.
Por todo ello, exigió a la secretaria general de los socialistas andaluces, Susana Díaz, que se «centre para volver a ser un partido serio, coherente que entienda y sea capaz de acordar políticas de Estado». A su juicio, «sería bueno para Andalucía que el PSOE-A encuentre su sitio y sus objetivos lo antes posible para sentarnos a hablar de los problemas de Andalucía y cómo resolverlos». El líder de los populares andaluces reiteró la necesidad de contar con «un PSOE serio y coherente como durante muchos años tuvo España y Andalucía, a pesar de las enormes diferencias políticas, pero que creía en las políticas de Estado y entendía que era capaz de acordar».
Los cambios en el PSOE-A adoptados ayer en su ejecutiva afectan a Mario Jiménez, un histórico que en los últimos años ha sido la mano derecha de Susana Díaz en la Cámara autonómica como portavoz del grupo parlamentario y con la que ha formado un tándem político efectivo en este tiempo. Mario Jiménez fue sustituido por otro onubense, José Fiscal, hasta ahora coordinador de la secretaría general del PSOE-A y consejero de Medio Ambiente en el último gobierno de Susana Díaz. También se acordó la inclusión en la ejecutiva del cordobés Joaquín Dobladez, que accede como delegado de Transición Ecológica y Cambio Climático. Afín a Pedro Sánchez, fue director del IAJ con Susana Díaz.
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.