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El presidente de la Junta, Juanma Moreno, defendió ayer en el debate sobre la situación de Andalucía en el Parlamento que esta Comunidad «ha mejorado» y «va por el buen camino» de la convergencia con el cambio de Gobierno de PP y Cs que preside desde hace un año. Varias veces a lo largo de las ocho horas de la confrontación dialéctica con cinco portavoces repitió como un mantra las palabras estabilidad, confianza y mejora de Andalucía por el hacer «moderado» de la coalición PP-Cs que preside, anotando como aval el crecimiento económico dos décimas por encima de la media nacional entre otros índices positivos. Tantas veces mencionó lo de que Andalucía ha mejorado como las dirigentes de la oposición, Susana Díaz (PSOE) y Teresa Rodríguez (Andalucía Adelante) esgrimieron que la Comunidad ha «ido a peor» porque «no hay ningún servicio público que funcione mejor» y se ofrece «la nada» tras una imagen falsa de buenos gestores.
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El debate más bronco fue con la líder de la oposición, Susana Díaz, que le pidió al presidente que no enfrente a los andaluces con el 28F, del que este año se cumplen 40 años, hito que el Gobierno PP-Cs quiere conmemorar reivindicando que no es patrimonio de los socialistas. Díaz inquirió a Moreno sobre qué entiende por andalucismo del siglo XXI cuando gobierna gracias al apoyo de Vox, partido que defiende la desaparición de las autonomías.
«Es usted muy osada. Habla de los pactos con Vox y me lo recrimina, pero no critica cuando su partido busca en la cárcel a Junqueras y negocia con ERC, con dirigentes condenados, con Bildu, con Podemos, a los que repudió hace poco», respondió Moreno, acusando a Díaz de ser la «reina de la incoherencia».
El presidente, que exhibió un tono moderado y conciliador hasta con Teresa Rodríguez, lo endureció con Díaz, a la que refregó su debilidad orgánica en el PSOE para convertir su intervención en un «mitin con el que ganar adhesiones cara a su futuro» en el PSOE. «Lo único que ha empeorado (de Andalucía) es usted; algo habrá hecho mal para ser la última (de los socialistas) en apagar la luz en la Junta de Andalucía».
La refriega dejó de lado la situación de la Comunidad para entrar en el cuerpo a cuerpo sobre el Gobierno de Sánchez y sus aliados de la investidura. «Sánchez está sustentado por lo más radical que hay en España y se va a reunir con un presidente (por el de Cataluña, Quim Torra) inhabilitado en lugar de hacerlo con el de Andalucía», espetó a Díaz. Esta buscó arrebatarle el titular al confesar que se equivocó con haber apoyado la investidura de Mariano Rajoy y «acertó Pedro Sánchez». «Lo hicimos por generosidad por España, pensando que cuando les tocara harían lo mismo, pero España les importa poco», dijo reprochando al PP que bloqueara la investidura de Sánchez para repetir las elecciones cuantas veces hiciera falta hasta «sumar con la ultraderecha» para gobernar.
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Pero el aliado Vox tampoco fue lo complaciente de otras veces y advirtió a Moreno que sería «inasumible» para su grupo que no cumpliera lo pactado, incluido el 'pin parental' en los colegios, sobre el que Moreno pasó de puntillas. El portavoz de Vox, Alejandro Hernández, incluso enfrió el tono triunfalista de Moreno al apremiarle a «pisar el acelerador» si quiere ver implementados los anuncios que hizo en el discurso inicial del debate, en el que, paradójicamente, coincidió con Susana Díaz en calificarlo más de investidura que de balance y análisis del año de gobierno.
Esa intervención inaugural, Moreno lo centró en la economía con anuncios como un banco de proyectos para ser acometidos con financiación pública y privada este primer semestre de 2020, un año que Moreno considera «fundamental» para el despegue de Andalucía creando riqueza. El presidente enfatizó la apuesta por la captación de empresas e inversores y para ello también avanzó que este mes se aprobará la anunciada ley para el fomento empresarial que reforme otras 18 normas y a su vez simplifiquen 814 procedimientos administrativos.
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En una intervención de hora y media, Moreno desgranó una batería de medidas para este 2020 y pidió tiempo y confianza a los andaluces para que el gran cambio que prometió al hacerse cargo de la Junta en enero de 2019 sea una realidad. «El cambio no se entiende si no es profundo» y para ello, afirmó, se necesitan reformas de gran calado.
Defendió la gestión del bipartito en los servicios públicos como sanidad, educación y dependencia. Frente a las críticas, como las protestas este domingo de las mareas sanitarias, Moreno reconoció que la sanidad pública «no la hemos arreglado, pero sí mejorado». En este sentido fue rotundo: «Que estamos mejor que antes, por supuesto que sí». Recordó que hay 400 profesionales contratados más en el SAS y todos los centros de salud aplican el cribado del cáncer de colon como ejemplos de la mejora. Achacó las deficiencias a la herencia recibida de recortes desde 2012 durante la crisis y pidió «tiempo» para demostrar que las iniciativas de mejora se notan. Recordó que se trabaja en la estabilidad laboral de 6.500 sanitarios y habrá oposiciones para 3.500 nuevas incorporaciones. En el capítulo de anuncios mencionó ampliar a todos los centros de salud la telemedicina con 20 especialidades distintas para resolver diagnósticos y consultas vía telemática y reducir los tiempos de espera.
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Moreno insistió en que Andalucía no dará «un paso atrás» en la lucha contra la violencia contra las mujeres, uno de los asuntos más controvertidos por las interferencias de Vox, su aliado en el Parlamento. Reiteró su oferta de un gran pacto andaluz sobre violencia de género lo que, en su opinión, «demuestra el compromiso de mi gobierno en esta materia». Un pacto que Díaz puso luego en duda, dado que Vox pide que se derogue la ley contra la violencia machista.
El presidente de la Junta se presentó como adalid contra el cambio climático, cuyas políticas en la Junta ha adscrito a su presidencia. Prometió que Andalucía será «vanguardia» de la sostenibilidad y como ejemplos anunció la plantación de más de un millón de árboles y plantas autóctonas en los próximos dos años para evitar la desforestación y como «enorme fuente económica». También avanzó el proyecto de mejoras en la A-92, la autovía que conecta Sevilla con Almería pasando por Málaga y Granada, consistente en articular una red de estaciones para carga de vehículos eléctricos y la plantación de árboles en sus márgenes para que sea «un escaparate del patrimonio natural».
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Además de las leyes citadas, Moreno recordó la aprobación de una ley de la función pública en la que se dará relevancia a la figura del directivo; y otra en cumplimiento del Estatuto en la que se regulará la participación de los agentes sociales (patronal y sindicatos) en las decisiones y normativas que elabore la Junta. Se trata de una petición de la CEA que la pasada legislatura se puso en marcha, pero que decayó con las elecciones. Moreno aporta la novedad de que la norma tendrá en cuenta al empresario autónomo. En la intervención con el portavoz del PP, José Antonio Nieto, también dijo que Andalucía participará en la Exposición de Dubai.
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