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josé luis piedra
Jueves, 28 de noviembre 2019, 14:50
La reciente sentencia del caso de los ERE se adueñó hoy del debate parlamentario en la sesión del control al Gobierno en la que el presidente, Juanma Moreno, aseguró que la sentencia es «una enmienda a la totalidad a 37 años de Gobiernos socialista» y destacó que el acuerdo todos los grupos políticos de la Cámara en pedir su dimisión.
Juanma Moreno acusó a Susana Díaz de «defender a su partido y a sus dirigentes, ahora condenados, en lugar de defender a Andalucía y eso le va a acompañar para siempre en su vida política».
La líder del PSOE-A, por su parte, replicó argumentado que el PP-A no tiene ninguna autoridad moral para hacer estas críticas tras admitir que el perdón a todos los andaluces por este caso pero rechazando las calumnias vertidas en el debate contra su partido.
Juanma Moreno dijo que «Díaz es presa de la desesperación y está atravesando un mal trance al estar todavía bajo estado shock por la sentencia que ha servido para poner de acuerdo a todas las fuerzas políticas de la Cámara, de ideologías tan dispares, para pedir su dimisión».
A su juicio, «la sentencia de los ERE ha dejado claro que se trataba de una decisión política y no jurídica y es un ejemplo de corrupción política institucionalizada, una forma de gobernar en la que los socialistas usaban la Administración andaluza como su propia casa con el objetivo de mantenerse en el poder a cualquier precio».
Moreno anunció que su Ejecutivo va a impulsar todas las medidas que estén a su alcance para recuperar la mayor parte posible del dinero defraudado en este caso pese a la dificultad provocada por anterior Gobierno socialista al decidir retirar la acusación particular en la causa judicial, lo que hubiera facilitado la recuperación del dinero. «algún día tendrá que explicarlo y aclarar el porqué de esa decisión», afirmó Moreno. A este respecto, Díaz le instó a que le pregunte a los letrados la causa de esa decisión y apeló al respeto a la división de poderes y que, por tanto, fue una decisión jurídica en la que no se entrometió su Gobierno que sí –subrayó- puso los controles para evitar que esto volviese a ocurrir e impulsó medidas para la recuperación de parte del dinero defraudado.
El presidente confesó sentir «bochorno, tristeza y vergüenza por el mayor caso de corrupción de la historia de la democracia con 680 millones defraudados que han salido de los bolsillos de los andaluces, un perjuicio incalculable a la imagen de Andalucía que nos costará mucho recuperar «, precisó.
Moreno avanzó que «a partir de ahora hay que limpiar el nombre de Andalucía y el Gobierno va a trabajar para ello con el objetivo de evitar que esta historia no vuelva a repetirse jamás y construir una nueva Andalucía transparente, honesta y eficaz que se parezca a los andaluces».
Con anterioridad los portavoces de Ciudadanos y PP-A, Sergio Romero y José Antonio Nieto respectivamente, arremetieron duramente contra el PSOE-A por esta sentencia y dieron juego al presidente para lanzar sus críticas por el fallo judicial y la responsabilidad política del partido que lidera Susana Díaz.
Sergio Romero sostuvo que «hay que limpiar la mancha y borrar la vergüenza de todos los andaluces por este caso e impedir que la foto de los expresidentes Chaves y Griñán en el banquillo de los acusados no vuelva a repetirse», mostrando en varias ocasiones esta instantánea en su intervención. José Antonio Nieto, por su parte, también
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