Junta y PSOE exhiben sus diferencias sobre el Presupuesto pero volverán a sentarse este lunes

El acuerdo parece más lejano que nunca, pero ambas partes volverán a sentarse el próximo lunes. La comisión parlamentaria de Hacienda celebrada este viernes para la presentación de los Presupuestos de la Junta del año próximo volvió a exponer la distancia que separa a los partidos que sustentan al Gobierno andaluz -PP y Ciudadanos- del principal grupo de la Cámara, el socialista, en la negociación para la aprobación de las cuentas. A pesar de ello, una delegación del PSOE acudirá el próximo lunes a la Consejería de Hacienda, donde celebrarán la quinta reunión desde que comenzaron los contactos.

Ambas partes afrontan las conversaciones desde parámetros diametralmente opuestos. Desde el Gobierno se reclama a todos los grupos el apoyo a un proyecto que consideran el mejor posible y del que aseguran que ha sido elaborado con criterios de pragmatismo y no ideológicos y que da respuesta a todas las reivindicaciones, especialmente el blindaje de los servicios públicos. Desde el PSOE-A se asegura que se trata de un proyecto elaborado para satisfacer a Vox y se pide la elaboración de uno nuevo que acabe con las concesiones ideológicas a esa formación, que los socialistas consideran inasumibles.

Ambas posiciones fueron puestas de manifiesto en la comisión parlamentaria por parte del consejero de Hacienda, Juan Bravo, por un lado, y del portavoz socialista en la materia y predecesor de Bravo en el cargo, Antonio Rodríguez de Arellano. Después de que éste considerara inaceptable la propuesta aprobada por el Consejo de Gobierno y que ha llegado al Parlamento, ya que en su opinión fue elaborada para ser acordada con Vox igual que los tres presupuestos anteriores, Bravo le acusó de haber roto las negociaciones al haberla planteado en esos términos. Pese a este reproche, aseguró que hasta el miércoles 24, día en el que el Parlamento debatirá las enmiendas a la totalidad, seguirá intentando llegar a un pacto que permita sacar adelante las cuentas. «Andalucía no les va a permitir no llegar a un acuerdo«, advirtió.

Según el consejero las críticas de Vox y el PSOE significan que el Gobierno «está en el centro« y reprochó a los socialistas que planteen líneas rojas con Vox, partido al que reconoció su aportación para que hubiera presupuestos en los tres ejercicios anteriores.

El portavoz socialista mostró su radical diferencia con esta postura. Dijo que es imposible que unos presupuestos le puedan valer igual a su formación que a Vox y le recordó que los partidos democráticos europeos «aíslan y combaten activamente a la ultraderecha».

Ramírez de Arellano recordó que Vox ha dejado claro que tiene «cero compromiso con Andalucía» y «quieren acabar con la Junta de Andalucía en general». «Si pueden vivir y dormir con ellos, allá ustedes -dijo dirigiéndose a Bravo- pero el PSOE es un partido incompatible con la ultraderecha».

El que ya ha adelantado su postura es el grupo parlamentario de Unidas Podemos. Su portavoz adjunto,Guzmán Ahumada, confirmó la decisión de presentar una enmienda a la totalidad contra un proyecto con el que, aseguró, se pierde «una oportunidad histórica, en un marco fiscal y económico favorable, para una recuperación justa».

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