El Gobierno andaluz no quiere que la oposición siga aludiendo a cientos de millones retenidos en las cuentas bancarias cuando reclama a la Junta más medidas para hacer frente a la crisis. Ese superávit que los grupos de izquierda mencionan en cada debate no existe.
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«En estos momentos de tanta dificultad, agradecería que los grupos políticos rememos en la misma dirección o si no es posible que, al menos, no contaminemos a la opinión pública con datos falsos, tales como que íbamos a cerrar 2021 con un superávit de 1.800 millones de euros», reclamó este jueves el consejero de Hacienda, Juan Bravo, tras recordar que en numerosas ocasiones informó de que los datos mensuales de ejecución presupuestaria no reflejan la realidad del cierre del ejercicio.
La Consejería de Hacienda ha informado del cierre del ejercicio 2021 en una situación de equilibrio presupuestario. Se trata en realidad de un déficit de 305 millones de euros, lo que supone un 0,19 por ciento del presupuesto y que se inscribe en el margen al que la Administración andaluza se había comprometido. De esta manera, ha logrado cuadrar sus cuentas por tercer ejercicio consecutivo, según ha confirmado el Ministerio de Hacienda.
Para Juan Bravo, el Ejecutivo andaluz ha cumplido con los objetivos marcados en su política de no acumular déficit a pesar de que Andalucía arrastra una infrafinanciación, una situación para la cual «no hay visos de solución, ya que desde el Gobierno central no se atiende la demanda de un fondo transitorio con el que corregir una situación que hace perder a la comunidad entre 800 y 900 millones de recursos que le corresponden cada año»
Bravo atribuyó a todas las consejerías el mérito de minimizar la generación de déficit y garantizar la estabilidad y la sostenibilidad de las cuentas públicas a pesar de que las reglas fiscales están provisionalmente suspendidas por la Comisión Europea como consecuencia de la pandemia.
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El consejero recordó el compromiso expresado por el Gobierno andaluz desde el inicio de la legislatura de tender al equilibrio presupuestario «para no dejar una herencia envenenada en forma de déficit a las generaciones venideras» y recordó en ese sentido que la Junta de Andalucía tiene que destinar cada ejercicio 223 millones de euros durante 20 años en concepto de devolución por las entregas a cuenta recibidas del Gobierno central en los años 2008 y 2009, que fueron muy superiores a las que le correspondían.
La Consejería ha recordado que éste es el primer año en el que la Junta de Andalucía consigue cuadrar sus cuentas, después de que en 2019 consiguiera revertir la situación heredada del año 2018, en el durante la gestión socialista se incumplieron las tres reglas fiscales: déficit, deuda y gasto, al dejar un déficit del 0,51% del PIB, equivalente a 813 millones de euros.
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