La filtración de un audio trunca el intento de cerrar la crisis del PP de Sevilla con una lista única

La filtración de un audio del alcalde de Carmona y candidato del sector crítico a la presidencia del PP de Sevilla, Juan Ávila, ha dinamitado los puentes para que se conformara una candidatura única al congreso provincial de esa formación, que se celebrá la semana próxima. En la grabación, difundida inicialmente en un grupo de wassap de supuestos afines a este sector, Ávila llama «sinvergüenzas» y «golfos» a miembros del sector oficialista, encabezado por la actual presidenta, Virginia Pérez, y denuncia supuestas maniobras de fraude para impedir la participación de una mayoría de afiliados en la votaciones en las que se decidirán los delegados, que se celebran este sábado.

Ávila, que se presenta avalado por el presidente de la Junta y líder regional, Juanma Moreno, y Virginia Pérez, que lo hace con el respaldo del presidente nacional, Pablo Casado, y su secretario general, Teodoro García Egea, se habían citado este viernes por la mañana para intentar llegar a un acuerdo y conformar una lista de unidad encabezada por Pérez, pero esta no se presentó. Fuentes del sector oficial argumentan que difícilmente se podría llegar a un acuerdo con quien ha lanzado esas descalificaciones.

El pacto, propiciado en los últimos días desde la dirección del PP andaluz, se presenta ahora como una posibilidad remota.

Tras una jornada vertiginosa en la que se dispararon los rumores, Ávila compareció en la tarde de este viernes para anunciar que sigue adelante con su candidatura. Tras reconocerse como el autor de las afirmaciones que aparecen en el audio y pedir disculpas a quienes se sintieron aludidos y ofendidos, insistió en su opinión de que se están produciendo irregularidades en el proceso previo al congreso al coartarse la posibilidad de participar a afiliados a quienes no se les permite ponerse al día de las cuotas, requisito para poder votar. Los afectados, asegura, se cuentan por cientos.

El conflicto, que amenaza con que el congreso se acabe dirimiendo en los tribunales, se viene gestando desde que Ávila decidiera presentar una candidatura alternativa a la de Virginia Pérez. Desde su sector se asegura que el partido, controlado por Pérez, está impidiendo con el respaldo de la dirección nacional que los afiliados se pongan al día con las cuotas atrasadas. Desde el sector de Pérez se explica esta situación en la supuesta detección de irregularidades en la procedencia del dinero, con cuotas de diferentes afiliados pagadas desde una misma cuenta.

Este viernes, un juzgado de Sevilla dictó un auto para expedirse sobre escritos presentados por dos afiliados a los que no se les había permitido ponerse al día con sus cuotas y por lo tanto tampoco podían participar en las votaciones previas al congreso. Estos afiliados reclamaban la suspensión cautelar de la convocatoria.

El juzgado rechazó acceder a esta petición, pero ordenó que se les permita votar para garantizar su derecho constitucional a la participación política.

Esta decisión fue interpretada de manera dispar por ambos sectores. Mientras que el oficialista lo interpreta como una confirmación de sus tesis, ya que el proceso sigue adelante y la decisión de autorizar la participación sólo afecta a los dos afectados, el encabezado por Ávila lo considera como un respaldo a su posición y vaticina que ahora serán cientos de afiliados los que acudan a la justicia para que se les permita votar, por lo que el congreso puede ir camino a ser impugnado.