El secretario general del PSOE de Andalucía, Juan Espadas, se ha sumado sin matices a la tesis de Pedro Sánchez y ha situado al presidente ... de la Juanma Moreno, como uno de los dirigentes políticos responsables de «la radicalización de la política que vulnera derechos fundamentales» de los adversarios políticos y su entorno familiar y personal. «Moreno Bonilla es el primer soldado del PP en la estrategia de Génova. Lo vimos en la falta de humanidad ante la carta sincera de Pedro Sánchez, en la que ponía de manifiesto el dolor de su familia», dijo Espadas, que aseguró que «la buena cara y el gesto complaciente y el espíritu de Doñana» de Juanma Moreno «no se lo cree nadie en Andalucía, y ahora, menos».
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Espadas aseguró estar doblemente satisfecho por la continuidad de Pedro Sánchez al frente del Gobierno de España, del PSOE «y de los intereses generales del país», y por la determinación «de combatir a quien intenta fragilizar los pilares de democracia y el Estado de Derecho y de garantizar los derechos fundamentales a las personas de manera permanente».
A pesar de las acusaciones lanzadas contra el presidente de la Junta, el secretario general socialista respaldó que el Gobierno de España y el PSOE «se pongan manos a la obra para revertir la radicalización de la polarización política» llevada a su juicio a valores extremos mediante acoso, hostigamiento y persecución. Espadas asumió el argumento de Sánchez, que aseguró que en su caso esa supuesta persecución viene ocurriendo desde hace diez años con el objetivo de «dinamitarlo» y «deshumanizarlo».
Aseguró también que la inmunidad parlamentaria «no es ni puede ser nunca inmunidad para insultar, injuriar y calumniar, como escuchamos en muchas sesiones del Parlamento andaluz y en todas del Senado».
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El presidente de la Junta, Juanma Moreno, subrayó por su parte que la democracia que impera en España no necesita que el presidente del Gobierno la rescate y recordó que ya hace seis días adelantó que se estaba ante «un show guionizado por la factoría Sánchez para reforzar su papel en las próximas elecciones catalanas y europeas».
«Me da pena y me avergüenza como español que se utilicen las instituciones, que un país se paralice durante cinco días por el interés personal de un señor que tiene los instrumentos para defenderse de lo que quiera, o bien de un supuesto ataque judicial o de un supuesto ataque de medios de comunicación».
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El presidente de la Junta enfatizó que España es una democracia con casi medio siglo de vida y Sánchez «no tiene que venir ni a decirle a los medios de comunicación lo que tiene que hacer, ni decírselo a los jueces si él considera que alguien está atacando su dignidad o su honorabilidad».
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