La economía andaluza crece y la disputa por colgarse la medalla, también

Un día después de conocerse el índice de crecimiento de la economía andaluza, y después de que la Junta sacara pecho también por la gran cantidad de empresas creadas en Andalucía durante el año pasado -el 80 por ciento del total del conjunto de España-, la más que probable futura secretaria general del PSOE de Andalucía, María Jesús Montero, intervino para atribuir todo el mérito del crecimiento económico a las políticas del Gobierno y recordar que la comunidad andaluza está a la cola de la riqueza por habitante precisamente porque no es capaz de subirse al tren del progreso económico.

En la Junta ven el panorama bajo un prisma opuesto. El presidente de la Junta, Juanma Moreno, atribuye esos resultados «al empuje que estamos dando a Andalucía «desde sociedad y las instituciones.

Para sostener esta argumentación, Moreno se refirió también a un dato que se conoció recientemente sobre la creación de nuevas empresas en 2024, de las que el 80 por ciento de las creadas en España lo fueron en Andalucía, y a los nuevos empleos del último trimestre de 2014, un tercio de los cuales también se crearon en esta comunidad. «Nuestra economía cada vez es más fuerte, más sólida y nos ayuda a progresar», dijo durante su intervención en la colocación de la primera piedra de un centro educativo en la provincia de Almería.

La próxima líder socialista y vicepresidenta primera del Gobierno no hizo alusión a esos datos, pero sí se refirió a la economía andaluza para pintar un panorama desolador citando el indicador de PIB por habitante, en el que la comunidad ocupa el último lugar en España. «Cuando el conjunto del país está creciendo cuatro veces lo que crece la Unión Europea, cuando estamos en récord de afiliación. ¿Por qué Andalucía no aprovecha ese impulso que está dando el gobierno de España?», se preguntó Montero en una entrevista concedida a Canal Sur atribuyendo a su gobierno el mérito de la marcha de la economía. La propia ministra se respondió: «Probablemente porque las energías las dedica todo el día a pelear, a confrontar y no a desarrollar el autogobierno y sus propias políticas».

También en relación con la sanidad, las diferencias de diagnóstico entre Montero y el presidente andaluz son abismales. La candidata a dirigir el PSOE-A aseguró que cuando estuvo al frente de la Consejería de Salud en Andalucía el sistema sanitario de la comunidad era modélico. «La gente recuerda perfectamente que cuando yo era consejera de Salud la sanidad era el orgullo de Andalucía, que exportábamos este modelo al resto, que éramos reconocidos por investigación con células madre, por tener garantías en los tiempos de espera y por ser capaces de traer tecnología que permitiera el abordaje de enfermedades», dijo.

Según Montero, Andalucía es ahora la comunidad con más demora para intervenciones quirúrgicas, algo que en su etapa hubiese hecho sonar «todas las alarmas».

El presidente de la Junta respondió con condescendencia a estas críticas, que atribuyó a que la ministra está en pleno proceso para ser elegida secretaria general de los socialistas andaluces. «Hay que entenderla, ella tiene que ganar la candidatura y tiene que hacer su campaña, entonces las exageraciones y ese tipo de cosas son normales», dijo tras asegurar que todo el mundo recuerda los recortes que se hicieron cuando Montero fue consejera y la contestación social que ello despertó.

Como prueba de esta afirmación, recurrió a otro dato. Dijo que el actual presupuesto sanitario de la Junta de Andalucía, el que figura en los presupuestos a para este ejercicio, es un 40 superior al que existía con la socialista al frente de la Consejería. Y reafirmó que ahora hay más profesionales, más hospitales abiertos y más medios.