Ramón Fernández-Pacheco

«Tenemos que conseguir ciudades más preparadas para las altas temperaturas»

-¿Por qué?

-La gran mayoria de la población se concentra en las ciudades, que son los lugares donde vivimos, donde pasamos nuestra vida, y también son los lugares que más contaminación producen y que más contribuyen al cambio climático. Centrar la acción de la Consejería de Medio Ambiente sólo en los espacios naturales protegidos, que por supuesto deben seguir siendo objeto principal, sería tener una visión bastante miope de la realidad ambiental del territorio.

-¿Qué puede aportar la Junta en este ámbito?

-Queremos ser un colaborador de todos los municipios que decidan apostar por la sostenibilidad. No podemos permitirnos que las olas de calor acaben con el turismo, con la viabilidad del territorio, que la falta de lluvias termine con la actividad económica y que las ciudades se conviertan en sitios hostiles. Tenemos que conseguir ciudades más verdes y preparadas para las altas temperaturas. Ese diálogo con las ciudades contribuyendo a mitigar el cambio climático pero también haciéndolas más habitables es fundamental y a eso vamos a Green Cities. A decirle a las ciudades de Andalucía que somos aliados para que entre todos comencemos entre todos a hablar de este tema. ¿Que en las ciudades ya se está hablando de este tema? Por supuesto que sí, pero de manera separada. Queremos que ese discurso sea unido y ayudar. La Junta nunca ha sido actor en Green Cities, ahora queremos serlo.

-¿Cuál va a ser entonces el papel de la Junta?

-Podemos elaborar planes, sacar líneas de subvención, financiar actuaciones... Podemos articular una política ambiental en los entornos urbanos de Andalucía, algo que hasta ahora no se ha hecho. Todo el mundo concibe la Consejería de Medio Ambiente como la consejería de los montes y las marismas. Queremos ser también la consejería que habla de medio ambiente urbano y ayudar a los ayuntamientos a emprender el camino de la sostenibilidad.

-¿Están identificados cuáles son los problemas a resolver?

-Tenemos claro cuál es el objetivo, hacer ciudades más amables. Y esto tiene una doble vertiente. Por un lado, que las ciudades sean habitables, evitar que las olas de calor acaben con el futuro de las ciudades porque ahí no se pueda vivir. En segundo lugar, que esos focos de contaminación que son las grandes ciudades cada vez lo sean menos. Ese es el objetivo, pero lo que nunca va a hacer la Junta de Andalucía es suplantar el papel que le corresponde a los ayuntamientos. Acabamos de aprobar una línea de subvención de 56 millones de euros para economía circular. ¿A quién va destinada esa ayuda?A los municipios de Andalucía. ¿En qué se lo van a gastar? En los que ellos vean. Nosotros tenemos que ser colaboradores necesarios.

-Hay cosas que la Junta sí puede hacer, sobre todo en lo relacionado con el transporte público metropolitano

-Y otros conceptos, como la biodiversidad urbana. En las ciudades hay flora, hay fauna. Hay un campo apasionante ahí donde tenemos que profundizar.

-En las zonas donde se está produciendo un gran crecimiento, como el área metropolitana de Málaga y la Costa del Sol en general, las obras públicas siempre van muy por detrás de las necesidades.

-Eso es aplicable a todo. Los tiempos de la administración son diferentes a los de la sociedad. La planificación pública estratégica es fundamental en la administración pública. En medio ambiente también, sobre todo ahora, cuando el cambio climático tiene consecuencias tan terribles. Si las ciudades no se preparan para las altas temperaturas no sólo serán inhabitables, sino que nadie querrá ir a verlas. Afortunadamente, me consta que los alcaldes están en ello. Hay ciudades en las que la calidad del aire ya se ha convertido en un problema social. También se puede planificar en torno a ello.

-¿La sociedad es consciente del cambio climático?

-La sociedad es consciente. El problema es que por un lado hay partidos que lo denostan y otros que intentan patrimonializar estos asuntos y al final lo que consiguen es que parte de la población sienta desapego. Ese tipo de banderas excluyentes son las que una administración responsable nunca debe coger. Evidentemente Juanma Moreno no va a acabar con el cambio climático en el planeta, pero su gobierno debe hacer lo que esté en su mano por hacer de Andalucía un sitio habitable que contribuya a que el cambio climático no siga empeorando Y en esa tarea yo creo que todo el mundo se suma, porque todo el mundo ve que nunca antes se habían batido los récords de temperatura en Andalucia, ni el mar había estado tan caliente, o el alga asiática en toda la costa de Andalucía. Llevamos cinco años de sequía. Las evidencias son tales que existe conciencia. El problema es si los políticos empezamos a tirarnos el cambio climático a la cara.