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La insistencia del Gobierno de España en aludir a una supuesta singularidad catalana para afrontar un cambio en el sistema de financiación autonómica y el anuncio de la vicepresidenta María Jesús Montero de que convocará en julio un Consejo de Política Fiscal han sorprendido a ... la consejera andaluza de Hacienda en Cartagena de Indias, donde asiste al congreso del Consejo Empresarial Alianza por Iberoamérica (CEAPI) y desde donde atiende a este periódico.
-¿Cómo interpreta las alusiones a la singularidad de Cataluña que se hacen desde el Gobierno cada vez que sale el tema de la financiación económica?
-Con preocupación. Cada vez que hay nuevas declaraciones nos preocupamos más porque ahora tratan de justificar la singularidad de Cataluña. En definitiva, no hay una singularidad. La singularidad es que Illa tiene que gobernar en Cataluña y para eso tienen que conseguir los votos del independentismo. La singularidad es la debilidad de Sánchez, que necesita los independentistas. Por eso están tratando de vestir esa singularidad, con lo cual nos parece cada vez más preocupante porque se están saltando todas las reglas, están saltando todos los principios constitucionales, están rompiendo la igualdad de los españoles, rompiendo el principio de cohesión y de solidaridad interterritorial. Yo no sé si ellos creen que los españoles somos tontos. Desde luego, en Andalucía estamos muy preocupados porque vemos que permanentemente se le están dando privilegios a unos territorios, en este caso al independentismo, para conseguir ahora el gobierno de Cataluña, antes para mantenerse en el gobierno de España. Y lo están haciendo con los recursos de todos los españoles.
-Estas alusiones a la singularidad catalana se plantean cuando aún no se ha atendido el reclamo andaluz por su infrafinanciación
-Es que llueve sobre mojado, porque tendrían que haber resuelto ya el problema que tenemos cuatro comunidades autónomas que estamos infrafinanciadas recibiendo por debajo de la media por habitante. Andalucía lleva ya muchos años, desde el año 2009, infrafinanciada al igual que otras tres comunidades autónomas. Entonces, no es de justicia que todavía no se haya resuelto ese problema, que en Andalucía recibamos 1.400 millones de euros menos que la media al año, y esto está ocurriendo desde el año 2009, y que no se haya previsto ninguna solución cuando la solución es muy fácil. Usted crea un fondo transitorio de nivelación, lo incluye los presupuestos generales del Estado, un fondo transitorio de 3.300 millones de euros, y con ello compensa a las cuatro comunidades autónomas Andalucía, Murcia, Castilla la Marcha y Valencia, que reciben por debajo del Estado. Y después de eso se empieza a trabajar en la reforma de financiación. ¿Pero primero iguales, no?
-Los partidos nacionalistas, y ahora también Salvador Illa, sostienen que el actual sistema es injusto con Cataluña
-¿Quién se va a creer que este sistema de financiación está perjudicando a Cataluña si lo pactó en el año 2009 Rodríguez Zapatero con Esquerra Republicana? Entonces, lo que sí tenemos muy claro es que se está agraviando y se está maltratando a Andalucía.
- ¿En el caso de que Cataluña consiguiera este objetivo de quedarse con todos sus impuestos, tener una especie de cupo como tienen País Vasco y Navarra, cuáles serían las consecuencias para el conjunto del sistema?
-El hecho de que Cataluña obtuviera 100 % de recaudado en su territorio cuando el resto de las comunidades recibimos el 50, %, de entrada, lo que está claro es que va contra la Constitución. Es inconstitucional. El cupo catalán no está recogido en la Constitución. Por tanto, nos estaríamos saltando la ley más importante de la democracia solo para que Pedro Sánchez se mantenga en el poder. Y lo que está claro es que esta ambición personal la van a pagar todos los españoles. Sería un golpe letal para el estado del bienestar, porque habría 30.000 millones de euros menos para distribuir entre el resto de las comunidades autónomas. Por lo tanto, se verían afectados nuestra sanidad, nuestra educación, nuestros servicios sociales y los servicios públicos esenciales, sin duda. Además de que supone una discriminación y un agravio, en especial para Andalucía, que ya de por sí es una de las comunidades que menos recibe del Estado.
-¿La solidaridad es el único argumento que hay para oponerse a esto ?
-No, no, el único no es, es uno de ellos. Es un argumento importante, no es el único. Es verdad que la solidaridad, si tú miras la Constitución 138, te dice que el Estado deberá estar la realización efectiva del principio de solidaridad velando por el establecimiento de un equilibrio económico adecuado y justo. Lo que está claro es que los territorios no son los que recaudan, los que pagan impuestos no son los territorios, son los ciudadanos. Eso lo decía la actual ministra de Hacienda por activa y por pasiva cuando era consejera. ¿Se entendería que lo que se recauda en el barrio de Salamanca se quedara en el barrio de Salamanca? Eso es lo que estaba pretendiendo el PSOE. Es abrir una puerta a la insolidaridad y agravar los desequilibrios, es crear una desigualdad brutal en este país.
-El Gobierno asegura que Andalucía ha recibido durante la presidencia de Sánchez más recursos que nunca y que por lo tanto no está siendo discriminada.
-Si se reciben más recursos es porque se ha incrementado la recaudación. No es por una decisión del gobierno de Pedro Sánchez que quiera aumentar la financiación a las comunidades peor financiadas.Son unos recursos que le pertenecen a las comunidades autónomas. Si aumenta la recaudación, aumentan los recursos, aumentan las transferencias de Andalucía, pero aumentan también la transferencia de todas las comunidades autónomas. Por lo tanto, sigue la brecha entre las que reciben más recursos y las comunidades que recibimos menos. No sólo se mantiene, sino que se está agrandando conforme pasan los años. Es que eso es una obviedad. Según el criterio de población ajustada, recibimos 1.409 millones de euros menos de lo que nos corresponde. Por eso hemos solicitado, mientras se reforma el sistema, ese fondo transitorio de nivelación.
-El PSOE y el Gobierno sostienen que esto tiene que resolverse en el Congreso y que el Partido Popular y las diferentes comunidades que gobierna no tienen una posición única y eso hace más difícil encontrar una solución.
-A ver, el Partido Socialista a veces parece que nos toma por tontos a los ciudadanos. ¿Tiene que resolverse en el Congreso? No, tiene que votarse en el Congreso. Sí, es una ley, tiene que votarse en el Congreso, pero previamente, ¿para qué existe el Consejo de Política Fiscal y Financiera, donde estamos representadas todas las comunidades autónomas? Para que se debata y de alguna forma, pues podamos participar en esa deliberación. Cuando María Jesús Montero era consejera de Hacienda en Andalucía, ella decía que era obligación y responsabilidad del Gobierno poner encima de la mesa un nuevo sistema de financiación autonómica. Luego habrá que debatirlo, habrá que analizarlo y habrá que mejorarlo si es posible, pero el que tiene la responsabilidad y la obligación de presentar un nuevo modelo del sistema de financiación autonómico es el Gobierno de España, no somos las comunidades autónomas, no es el Partido Popular, que está en la oposición, ni el Partido Socialista, es el Gobierno de España y eso es lo que decía cuando era consejera.
-Los agentes sociales en Cataluña están movilizados reclamando el sistema de financiación al que aspiran. Organizaciones de empresarios, cámaras de comercio, sindicatos ¿Usted echa de menos mayor movilización de la sociedad andaluza en esta cuestión?
-Estamos trabajando con los distintos agentes sociales en diferentes áreas para lograr la implicación de toda la sociedad. Por ejemplo, con la CEA, que ha pedido en numerosas ocasiones que se haga justicia con la financiación de Andalucía, organizamos hace un año unas jornadas con un experto de FEDEA para analizar y explicar la situación. También hemos comenzado contactos con el sector sindical con el fin de que apoyen nuestras reivindicaciones. Tenemos que ser más beligerantes porque la infrafinanciación que sufre Andalucía es un tema crucial y un problema que afecta muchísimo al futuro de Andalucía y de los andaluces, ya que la prestación de servicios públicos depende en gran medida de esta financiación y, por lo tanto, tenemos que defender nuestros intereses con uñas y dientes.
-A la polémica de la financiación se ha sumado otra cuestión, que es el retraso en las entregas a cuenta.
-Las entregas a cuenta están sin actualizarse desde el mes de enero. O sea, nos están haciendo llegar unas entregas a cuenta que no están actualizadas. Esto significa que Andalucía está recibiendo 150 millones de euros menos cada mes. Por lo tanto, al mes de mayo son casi 800 millones de euros menos. Esto es muy fácil de resolver, se pueden actualizar por decreto y nos llegarían a todas las comunidades autónomas. En el año 2009 pasó una situación similar y parecida y lo hicieron por decreto.
-¿Esto que consecuencias tiene?
-Pues que hay territorios ya que están asfixiados y que están teniendo problemas de tesorería. No es el caso de Andalucía, pero no es justo que unos ingresos que corresponden a impuestos que ya han pagado los andaluces hace dos años no nos estén llegando y lo esté reteniendo el gobierno de España cuando fácilmente puede hacer un decreto para actualizarlo. Entre la no actualización de las entregas a cuenta, entre la infrafinanciación de los 1400 millones menos cada año, entre los nuevos privilegios a otros territorios y agravios a Andalucía, al final el presidente Sánchez se ha convertido en el presidente más anti andaluz de la historia.
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