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La presidenta del Parlamento andaluz, Marta Bosquet, ha hecho «borrón y cuenta nueva» por el incidente protaganizado este jueves por el portavoz parlamentario de Vox, Alejandro Hernández, y no ve «necesario» que tenga que expresar sus disculpas ni que tenga que ser reprobado por abandonar el pleno con un gran enfado y profiriendo la expresión «a tomar por culo» por no concederle la palabra. «Por desgracia, a diario en cualquier cámara, incluido el Congreso de los Diputados, ocurren estos incidentes que son lamentables y condenables y más en una situación tan difícil como esta».
La presidenta del Parlamento, en declaraciones a la Ser y Canal Sur, rechazó llevar el incidente al plano personal y aseguró tener «mucho temple y capacidad de aguante» para ello y añadió que «lo importante es que la vida parlamentaria siga y que nosotros ya hemos hablado y aclarado cualquier cuestión», en alusión a la conversación que ha mantenido con el portavoz de Vox para abordar el incidente que transcurrió con «tono cordial para tender puentes», precisó.
Además, mostró su confianza en que el plante de los diputados de Vox en el Pleno de este jueves se quede solo «ahí y en un gesto» y vuelvan a retomar la actividad parlamentaria con normalidad. De hecho, dijo que Hernández participó tras el incidente en una reunión con el resto de portavoces para abordar la regulación de la actividad de la Cámara tras la ruptura del grupo de Adelante y el paso de nueve diputados a no adscritos.
Bosquet lamentó que lo ocurrido se haya «sobredimensionado y se haya dado más importancia a estas cosas negativas que a las positivas» como el hecho de que los presupuestos comiencen a tramitarse por la Cámara autonómica.
«Tengo la obligación como presidenta de intentar mantener el respeto en la Cámara, y a veces es difícil, porque así lo mandata el reglamento y hacer que se respeten los turnos de intervención y nadie está facultado para poder quitar la palabra salvo el presidente», aclaró Bosquet, justificando así que no puede permitir que «cuando alguien tiene la palabra, otra persona le interrumpa fuera absolutamente quien fuera, eso es una cuestión que debe quedar clara».
Bosquet confesó que nunca se lleva nada de lo que ocurre en el Parlamento al terreno personal porque «en ese caso me pasaría el día enfadada con multitud de diputados».
Con todo, expresó su firme condena a cualquier acto con falta de respeto en cualquier cámara porque «cuando los ciudadanos nos votan a los representantes públicos no lo hacen para eso, y más en esta época tan terrible que estamos viviendo en la que creo que espectáculos como éste o como el que se pueda dar en el Congreso de los Diputados, desde luego no beneficie ni ayuda a los ciudadanos ni a la clase política, que lo que hacemos es alejar aún más a los ciudadanos», remarcó.
Hernández pidió la palabra este jueves en Pleno del Parlamento durante la sesión de control al gobierno después de que Susana Díaz acusara a Moreno de haberse «abrazado a los herederos del franquismo» para pactar los presupuestos, lo que provocó su enfado y pidió la palabra reiteradamente a la presidenta para mostrar su malestar sin que se le concediera. Al instante, se marchó de us escaño junto al resto de diputados de Vox tras proferir la expresión «a la porra y a tomar por culo» y golpenado el micrófono.
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