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Lalia González
Martes, 15 de diciembre 2015, 00:35
El Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA) aprobó anoche el reparto del trabajo en el juzgado de instrucción número 6 de Sevilla propuesto por la titular, María Núñez Bolaños. Por tanto, el magistrado de apoyo, Álvaro Martín, se hará cargo de la instrucción de las seis piezas separadas en que hasta ahora ha dividido la causa de los ERE, entre ellas la que trata sobre el llamado «procedimiento específico», es decir la que debe enjuiciar el papel desempeñado por los expresidentes Chaves y Griñán y otros 50 altos cargos de la Junta de Andalucía.
La posibilidad de que Martín se hiciera cargo de este asunto estaba en el ambiente desde que el TSJA, y el Consejo General del Poder Judicial a continuación, decidieron apartar de la instrucción a la anterior titular, Mercedes Alaya, que pese a haber ganado la plaza de magistrada en la Audiencia Provincial sevillana quería mantener las «macrocausas» que investigaba.
Álvaro Martín es el presidente de la asociación conservadora de jueves, la Asociación Profesional de la Magistratura, para Andalucía Occidental. Titular del juzgado número 2, desempeñaba como juez de apoyo en el número 6 desde septiembre de 2013, con Mercedes Alaya al frente, y se ocupaba de los asuntos ordinarios. Cuando la plaza quedó vacante, Martín optó a relevar a la mediática jueza, pero el concurso fue ganado por Núñez Bolaños, más antigua en la carrera judicial.
El acuerdo comunicado por la noche por el TSJA indica que Martín, «en un marco de plena colaboración y entendimiento» asumirá la instrucción de las seis piezas separadas, es decir el «procedimiento específico», la relativa a las sobrecomisiones que cobraron las aseguradoras y mediadoras y las referidas a las ayudas que recibieron las empresas Acyco, Sayago y Rosendo, Surcolor y Cenforpre.
Mientras, Núñez Bolaños se queda con las otras macrocausas, la referida a los cursos de formación y la que trata sobre las presuntas irregularidades en Invercaria.
El acuerdo de la sala de gobierno del TSJA suscribe el escrito previo de Núñez Bolaños, que explica que el objetivo es «dar un impulso de especial relevancia a las diligencias» de los ERE, tras cinco años de instrucción y con más de 250 imputados, para que los primeros juicios puedan celebrarse en 2016.
Por ello, El TSJA asume la propuesta de Núñez Bolaños de pedir de un nuevo juez de refuerzo, para los asuntos ordinarios.
La sala señala que estos criterios podrán ser revisados y modificados a petición de los interesados y en función de las necesidades del Juzgado, por lo que acuerda solicitar a la titular del Juzgado número 6 que informe en un plazo no superior a tres meses sobre la medida de apoyo y refuerzo adoptada.
Asimismo, el TSJA «toma conocimiento» de la posiblidad de adscribir «en su momento» una Unidad de Apoyo para Causas por Corrupción (UACC), prevista en la ley para recabar asistencia de otros jueces especializados en estos asuntos, como colaboradores técnicos procedentes de otras jurisdicciones, especialmente contenciosa, tal y como había pedido NúñezBolaños.
El acuerdo será elevado al Consejo General del Poder Judicial.
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