Cudeca amplía su campaña de donaciones para mantener el servicio de cuidados paliativos

Apenas 5.000 separan a la institución de los 185.000 necesarios para financiar durante un año a un equipo completo de asistencia domiciliaria, integrado por un médico, un enfermero, un psicólogo y un trabajador social, especializados en cuidados paliativos. Este equipo atenderá a una media de 250 pacientes al año en sus casas, con una media de 3-4 visitas diarias, dando el soporte necesario a enfermos y a familias en el trance final de sus vidas.

Contemplada inicialmente hasta el pasado 6 de enero, la proximidad del objetivo ha hecho que los responsables de la fundación hayan decidido ampliar la campaña hasta el próximo 31 de enero. Existen varias fórmulas para colaborar en la campaña, aunque la más eficaz es la donación a través de la página web www.efectogirasol.org (www.sunflowereffect.org para público extranjero). Igualmente, los ciudadanos pueden hacer sus aportaciones a través de la entidad bancaria de La Caixa, en el número de cuenta ES11 2100 9032 3722 0010 8366. En tercer lugar está la opción de Bizum (Cudeca, 00206), donde habrá que marcar la opción 'Donar a ONG' para que el trámite se realice correctamente.

Entre las donaciones más abultadas destaca la de la Fundación La Caixa, que aportó al inicio de la campaña 30.000 euros. Esta cantidad se ha ido sumando a las donaciones de particulares -muchos de ellos, familias de pacientes y asociados de Cudeca- e instituciones públicas y privadas. Entre ellas, la aportación reciente por parte del Ayuntamiento de Estepona, que ha entregado los 7.000 euros de beneficio obtenidos tras un concierto de Miguel Poveda. En ese esfuerzo transversal de suma de voluntades, también han sido muchos los personajes conocidos que en las últimas semanas han puesto su fama al servicio de la causa, caso de Javier Ojeda, Antonio de la Torre, Diana Navarro, Carlos Álvarez, Rozalén, Remedios Cervantes, Domi del Postigo, Pablo Alborán, Pablo López o Miguel Ángel Martín, entre otros.

Una vez finalizada, la fundación ya estudia nuevas iniciativas para ampliar las vías de financiación, un recurso fundamental para la viabilidad de los servicios de cuidados paliativos en hospitales y domicilios si se tiene en cuenta que el presupuesto de Cudeca ronda los cuatro millones de euros al año y que la pandemia ha dejado un agujero importante en sus cuentas. La dificultad para el funcionamiento convencional de sus tiendas benéficas -cuyos recursos representan una parte imprescindible de las cuentas y que tuvieron que permanecer mucho tiempo entre el cierre y las restricciones- y la bajada en el número de voluntarios que las atienden han llevado a la fundación a explorar estas otras vías para garantizar su supervivencia. Con respecto a las tiendas solidarias, Cudeca añade a su llamamiento para participar en la campaña una petición específica para sus establecimientos de El Palo y Echevarría, donde necesitan voluntarios con urgencia.