El Club de Rugby demanda el campo que le prometió el Ayuntamiento

Hace ya siete años que el Ayuntamiento planificó la construcción de un campo de rugby en la zona de El Cónsul, en concreto incluyó la instalación dentro de la última fase del plan que ha venido desarrollando desde 2005 para renovar los campos de fútbol de los barrios y dotarlos de césped artificial, sin embargo la actuación se ha ido posponiendo en el tiempo hasta llegar a un punto en el que el equipo de gobierno municipal argumenta que no puede acometerla ahora por carecer de fondos para nuevas inversiones.

Así lo apuntó a este periódico el concejal de Cultura, Turismo y Deportes, Damián Caneda, quien aseguró que, en estos momentos, el proyecto está «paralizado» por falta de recursos. Sin embargo, hace un año, el Ayuntamiento llegó a reservar una partida para este campo, cuyo aspecto puede conocerse con detalle en el cartel que se ubica junto a la parcela en la que estaba prevista su construcción. En concreto se trata de una zona situada junto a la rotonda en la que se levantan los conocidos como bloques verdes de El Cónsul, los primeros que se levantaron en este sector de la ciudad. El campo se trazó junto a unas pistas deportivas y una piscina sin uso, si bien para acometerlo era necesario hacer un desmonte.

Esa reserva presupuestaria procedía de un crédito de 15,5 millones de euros que se liberó con la cesión de las competencias en materia de promoción de viviendas protegidas desde el Instituto Municipal de la Vivienda (IMV) a la nueva Sociedad Municipal de Viviendas. Según informaron desde el equipo de gobierno, y tal y como publicó este periódico (ver SUR11/7/2011), de ese montante, un millón de euros se reservó para completar la dotación de césped artificial en los campos de fútbol y para realizar el de rugby. Sin embargo, el dinero no ha llegado al proyecto de El Cónsul.

Desde el club que en Málaga aglutina a los aficionados a este deporte se insiste en la demanda de poder ver hecho realidad lo que ahora aparece solo en el cartel de la parcela. José Juan Atorrasagasti, portavoz de la entidad, señaló que el Consistorio «ha dejado el campo de rugby para el final». «Justo cuando ponen el cartel y parece que ya lo teníamos, ahora resulta que no hay dinero», criticó al tiempo que recordó las dificultades que han tenido a los largo de la última década para poder realizar los entrenamientos y partidos, ocupando pistas de la Universidad de Málaga e incluso de clubes de fútbol de los barrios, aunque fueran terrizas. «Llevamos casi una década ya esperando este proyecto y ahora nos encontramos con que no hay dinero para hacerlo», señaló Atorrasagasti, quien detalló que son más de doscientos los jugadores con licencia en Málaga y provincia que podrían beneficiarse de este campo. «Aquí nadie cobra, los jugadores tienen que pagárselo todo, el club lo mantienen un centenar de socios y no tiene recursos para poder pagar un alquiler de pistas deportivas, por lo que dependemos de lo que la administración nos pueda ayudar», insistió.

Campus de Teatinos

Pese a su situación económica, el club se conformaría con poder disponer al menos de un suelo en el que poder realizar el campo en varias fases buscando la financiación por varias vías, pero esta opción no ha sido atendida tampoco por el Ayuntamiento. No obstante, según Damián Caneda, desde el Área de Deportes sí se ha ofrecido la posibilidad de seguir colaborando con el club facilitando que pueda hacer uso de las pistas deportivas del campus de Teatinos. «Queremos firmar un acuerdo con la Universidad para el uso público de esas pistas de modo que el Club de Rugby pueda seguir haciendo uso de ellas para sus partidos y entrenamientos», dijo Caneda.

Para José Juan Atorrasagasti, que el Ayuntamiento quiera facilitarles el uso de los campos universitarios es al menos un consuelo, ya que estaban teniendo problemas para su alquiler el próximo curso. «La UMAnos pide un alquiler que, si podemos asumir con la subvención del Consistorio o mediante otro tipo de acuerdo, perfecto, pero nuestro anhelo sigue siendo poder contar con un campo propio», concluyó.