El Antequera confirma su supremacía en la Comunidad (26-23)

El Antequera 2010 ya tiene en propiedad el trofeo de campeón de la Copa de Andalucía. Lo consiguió ayer tras ganar por tercera vez el título, en esta ocasión ante el Pozoblanco, muy motivado y que jugaba ante su afición, pero no pudo con una plantilla superior y que, poco a poco, va acercándose a su mejor nivel.

Tras la exhibición que dio el equipo en la semifinal ante el Moguer, ayer tocó ponerse el mono de trabajo. Y es que el rival presenta este año una plantilla más que conocida por el Antequera. El Pozoblanco es casi el Antequera de hace unos años con un bloque liderado por Quino Soler, Paco Bustos, Nacho Vico, Dani Alcedo y Curro Muñoz, a los que hay que añadir otros ex del Antequera (Álex Rubiales o José Carlos López).

Con la motivación evidente de jugar ante el equipo que en su día los descartó, el Pozoblanco saltó a la pista muy enchufado y demostrando que no sería un mero comparsa. Así, en los primeros minutos del partido, la igualdad fue la nota dominante hasta el 6-5. En el Antequera brillaron los extremos y la primera parte fue de protagonismo absoluto de dos hombres, el canterano Nacho Soto y el pivote Rafa Baena, que volvió a demostrar que en seis metros es casi imparable.

El Pozoblanco se defendió como pudo, pero estuvo espeso en ataque (sólo ocho goles en la primera parte), donde comenzó a brillar un extramotivado Nacho Vico.

Contraataque

Tras la reanudación, Soto continuó a lo suyo con goles de contraataque y desde el extremo, pero los locales apretaron el marcador gracias a los goles de Vico, que dio un recital desde los siete metros con lanzamientos de todo tipo, y los tiros de Serrano desde fuera (14-13). Fue entonces cuando el Antequera apretó el acelerador y sentenció el choque. El pivote Andersson siguió la estela marcada por Baena y los contragolpes de Alexis convirtieron los últimos minutos en un trámite (20-14).

Con el partido sentenciado se vieron buenas acciones ofensivas de Moya, Chelu y Luisfe que superaron la agresiva defensa (3-2-1) que dispuso Paco Castillo. Al final el encuentro llegó a calentarse en algunas acciones, pero no pasó a mayores. Para cerrar el partido, Vico dejó otro detalle de los suyos con un golazo desde nueve metros al sacar el balón casi desde el suelo.